En pleno siglo XXI todavía quedan muchos estereotipos respecto a la relación entre la mujer y el vino. Siempre hay alguien tratando de controlar lo que una mujer puede o no consumir y de qué forma lo hace. Por eso, hoy vamos a romper algunas ideas preconcebidas y erróneas acerca de la mujer y su papel en el universo del vino.
Existen muchas mujeres dejando huella en los viñedos y aportando grandes elementos en el cultivo, producción, cata y estudio de esta bebida. Entre ellas destaca Valentina Ortiz Monasterio, la Directora de Nación de Vinos, quien señala cinco paradigmas que es necesario romper.
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1. “Las mujeres sólo toman vino blanco”.
¡Nada que ver con la realidad! Una encuesta realizada por Nación de Vinos entre mujeres confirmó que el 47% de ellas prefieren los tintos, seguidos por los blancos (31%), espumosos (13%) y rosados (9%).
2. “El vino es para ellos.”
Otra falsedad. Se estima que en 2025 las mujeres mexicanas serán las principales consumidoras de vino en el país. Tan sólo en los últimos años las mujeres han incrementado su participación en el mercado en, que hoy se encuentra dividido en 58% hombres y 42% mujeres.
Laura Zamora, enóloga. Imagen: santo-tomas.com
3. “Los mejores enólogos son hombres.”
Que cada vez contemos con un mayor número de mujeres enólogas y productoras no sólo tiene que ver con un tema de gusto o preparación, sino también físico y biológico. Algunas investigaciones de reconocidas universidades europeas confirman que, como género, las mujeres tienen una mayor capacidad olfativa y gustativa, que favorece su talento para la cata y la creación de grandes vinos.
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4. “El vino lo escoge el hombre”
Los meseros siguen pensando que el único que conoce de vinos es el hombre y suelen dirigirse a él para escoger la botella. Lo cierto,es que las mujeres saben cada vez más de variedades, uvas y bodegas, por lo que es necesario dejar de asumir conocimientos sólo por el género del comensal.
Natalia Badán, creadora del tinto Mogor Badán. Imagen: wsj.com
5. “Las mujeres sólo participan del vino al tomarlo”
Las mujeres mexicanas no sólo toman vino, sino que forman parte de una industria en crecimiento en la que ocupan distintas posiciones de liderazgo. Para ejemplo un botón:
· Laura Zamora, de Santo Tomás, es la primera enóloga en dirigir completamente una bodega mexicana.
· Tru Miller es la propietaria de Adobe Guadalupe.
· Cristina Pino dirige el laboratorio vitivinícola de Monte Xanic.
· Natalia Badán, de Cavas del Mogor, es la creadora del icónico tinto Mogor Badán.
· Lulú Martínez Ojeda, enóloga de Henri Lurton
Con información de Nación de Vinos.
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