En la cocina existen diferentes tipos de sabores poco conocidos y extraordinarios como los quelites mexicanos que son poco comunes. Estas hierbas generalmente pasan por desapercibidas por muchos. Sin embargo, encierran un gran potencial gastronómico porque son muchos, porque saben delicioso y porque son muy nutritivos.
Los quelites ofrecen beneficios que merecen un lugar destacado en nuestra cocina. Te invitamos a descubrir algunos de estos quelites mexicanos poco conocidos y a explorar cómo incorporarlos en tus recetas, para añadir un toque auténtico y saludable a tus platos.
Quelites poco comunes
En la cocina mexicana hay tesoros escondidos que merecen ser descubiertos. Entre ellos están los quelites poco comunes, como los quintoniles, berros, alaches y malva. Aunque no son tan populares, añaden sabores únicos y nutrientes a tus platos.
Todos hemos escuchado hablar del epazote, de verdolagas, de huauzontles, pápalo y romeritos. Pero, ¿Sabías que hay un mundo de aproximadamente 500 especies silvestres de ellos en nuestro país?
1. Quintoniles
Provienen de la planta de Amaranthus o amaranto, que cuenta con 11 variedades en el país. A diferencia de la semilla tostada, cuando hablamos de quintonil nos referimos al consumo de la planta como verdura, antes de que florezca.
Conocidos también como “quelites de horno”, estos pequeños brotes verdes son una fuente rica en hierro, proteínas y fibra. Su sabor suave y ligeramente terroso los hace ideales para ensaladas, sopas y revueltos, aportando un toque fresco y nutritivo a tus comidas.
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2. Berros
Aunque son más conocidos en algunas regiones, los berros son un ingrediente subestimado en la cocina mexicana. Con su sabor picante y ligeramente amargo, los berros agregan un toque de frescura a ensaladas, sándwiches y guisos.
Además, son una excelente fuente de vitamina C y antioxidantes, que supera en más del doble a la naranja, y también contienen provitamina A y vitamina E. Además, son ricos en minerales esenciales como el calcio, el hierro no hemo y el potasio, así como en ácido fólico.
3. Alaches
Los alaches son un tipo de hierba con hojas verdes irregulares que se asemejan a una estrella y con pequeñas flores moradas hermosas. Se encuentran generalmente cerca de riachuelos y entre los campos de cultivo, y están cargados de antioxidantes, fibra, calcio e hierro.
Estos brotes tiernos provienen de la planta del maíz y son apreciados por su textura suave y su sabor ligeramente dulce. Los alaches se pueden utilizar en una variedad de platos, desde tamales hasta guisos y ensaladas, añadiendo un toque de frescura y un sabor distintivo que complementa perfectamente otros ingredientes.
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4. Malva
Estos alaches se pueden hallar en una variedad de cultivos de cereales como el maíz, arroz y avena, así como cerca de los cacahuates, frijoles, alfalfa y otros cultivos, incluso algunas frutas. En México, esta planta se encuentra en casi todos los estados, lo que explica la diversidad de nombres que recibe.
Esta planta es una joya culinaria con un sabor suave y ligeramente almendrado. Las hojas tiernas de malva se pueden agregar a sopas, guisos y salteados, o incluso incorporarlas en tortillas y tamales. Además de su delicioso sabor, la malva es una excelente fuente de vitamina A y calcio.
Explorar estos quelites mexicanos poco comunes es abrir una puerta a nuevas posibilidades en la cocina mexicana, aprovechando ingredientes auténticos y llenos de sabor que enriquecen nuestras recetas y nos conectan con la rica tradición culinaria de México.
