7 cosas que no debes hacer si cocinas con marihuana

1. Utilizar la hierba cruda

Cocinar con marihuana realmente no es difícil, sin embargo, es necesario poner atención a ciertos puntos para lograr buenas recetas que puedas disfrutar en casa sin problemas. Las recetas más populares para incluir esta hierbas son los postres horneados, como brownies, galletas o panqués. Sin importar que platillo elijas, lo primero que debes tomar en cuenta es que la hierba requiere de una cocción antes de comenzar con la receta principal. A este proceso se le conoce como ‘descarboxilación’ y consiste en hornear por al menos una hora la cantidad de hierba de marihuana que se va a utilizar. Se coloca dentro del horno con una temperatura fija de máximo 120 grados centígrados. Es necesaria la supervisión y movimiento en todo momento, para evitar que se queme.

2. Cocinar a fuego alto

Por otro lado, el factor de la temperatura es vital al momento de cocinar con marihuana. Esto aplica al momento de cocinar primero la hierba, así como al momento de la preparación formal del platillo. La cocina requiere de paciencia y tiempo exclusivo de atención, por lo que será mejor que tomes una tarde libre para poder disfrutar todo el proceso, sin tener el tiempo encima. De esta manera, también puedes ayudarte de recetas que requieran un proceso de cocción lenta, con una temperatura no mayor a los 190 grados centígrados.

3. Olvidar un agente graso

La materia grasa es el mejor aliado para aprovechar al máximo las propiedades de la marihuana. Podríamos decir que esta es la preparación inicial, que posteriormente podría incorporarse a galletas, panqués u otro platillo que se tenga en mente. Es posible optar por mantequillas o aceites. Así obtienes un ingrediente que funge como conexión directa a la mezcla posterior. Como consejo extra, añade un poco de agua para evitar que los aceites se quemen, pues el proceso de cocción es largo.

4. Dejar las porciones en segundo plano

Si es tu primera vez cocinando con marihuana o bien, buscas un efecto mayor en tus preparaciones, no se trata únicamente de añadir la hierba al tanteo. Debes tomar en cuenta que cada cuerpo reacción de manera diferente. Además, de que el tiempo en hacer efecto también puede variar en distintas ocasiones. Es por ello que si apenas comienzas a adentrarte en la cocina canábica, lo mejor es iniciar con cantidades pequeñas. Además, también debes considerar que al cocinar con esta hierba se busca un sabor sutil, que se fusione a la perfección con los otros sabores. El sabor original de la marihuana es fuerte, por lo que no querías que este sabor herbal sea el que predomine.

5. No rectificar sabor final

Lograr un buen juego de sabores en el resultado final tiene que ver completamente con la forma en que se incorporaron todos los ingredientes durante el proceso de preparación. Al preparar el aceite o mantequilla con marihuana, debes asegurarte de batir bien la mezcla completa. Busca un recipiente hondo amplio, para tener un mayor rango de movilidad, la fuerza del brazo hace toda la diferencia. Por otro lado, también es importante lograr una mezcla uniforme, así puedes asegurar que cada porción de galleta o panqué tendrá notas y efectos similares.

6. Triturar la hierba al máximo

Ciertas recetas requieren del corte fino de los ingredientes, sin embargo, en esta ocasión no es una acción recomendable cuando se trata de cocinar con marihuana. Puede triturarse sin convertir la hierba en polvo. El objetivo principal es para no activar un sabor más intenso, que termine por predominar en el resultado final de la preparación. Se recomida lograr el tamaño similar a las finas hierbas o el orégano. Asimismo, considerar realizar cortes similares, para que no encuentres grandes pedazos al momento de mezclar los ingredientes.

7. Liberar el vapor

Finalmente, para mantener las propiedades completas de la marihuana al cocinar con ella, es necesario guardar el vapor en todo momento. Por ello se prefieren los platillos con método de cocción al horno. Además de funcionar como una cocción lenta, se cierra por completo durante un periodo largo de tiempo para guardar los aromas hasta el último momento. Conservar el vapor ayuda a lograr mejores efectos en las recetas comestibles que incluyen marihuana.