Encontrar el molde perfecto para hornear no es tarea que pueda tomarse a la ligera. No es sólo cuestión de formas y tamaños: importa también el tipo de postres que vaya a prepararse, el horno a utilizar, el acabado que desees dar, e incluso si quieres incorporar algún diseño o grabado en él. ¡Conoce los diferentes moldes de repostería y cuál es el ideal según tu postre!
Por Michelle López – @Mich_Lv
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Silicón
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Cada vez ganan más popularidad estos moldes, tanto para cupcakes o pasteles como para gelatinas y chocolates. Tienen a su favor que resisten temperaturas altas y bajas, y que no requieren tanto engrasado. Su flexibilidad hace el desmolde más sencillo, aunque por lo mismo debes tener cuidado si utilizas cuchillos, palillos, u otro objeto filoso – el silicón es mucho más susceptible. Suelen tener formas o adornos ya incorporados en el diseño, lo cual facilita el trabajo de decoración.
Hierro fundido esmaltado
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Éste es un material fuerte y resistente, requieren poco engrasado, y el calor se distribuye de forma rápida y eficiente, lo cual reduce el tiempo de cocción y da excelentes resultados. Son muy buenos para brownies, galletas, o tartaletas, pues estos moldes dan un acabado más crujiente. El único problema es que suelen ser más costosos, aunque el producto final vale la pena.
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Aluminio
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Son resistentes y duraderos, pero deben engrasarse antes de cada uso, sea con mantequilla, spray antiadherente, o colocando una hoja de papel encerado en la superficie. Existen moldes de este material prácticamente para cualquier tipo de pan: bizcochos, hogazas, cupcakes, pasteles, etc, y por lo general son baratos. En moldes rectangulares y de mayor superficie (por ejemplo, charolas de galletas) es muy importante asegurarse de la calidad, ya que en algunos casos el material se desgastará o quemará primero hacia el centro, lo cual estropea la cocción uniforme de lo que estés preparando.
Cerámica
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Los moldes de cerámica vitrificada permiten una cocción uniforme, ya que este material facilita la conducción de calor, si bien hay que engrasarlos perfectamente para evitar que se pegue cualquier migaja. Toleran muy bien los cambios de temperatura y pueden utilizarse en horno tradicional y en microondas, aunque tardan más en absorber el calor y se enfrían más rápido. Algunos tipos y formas incluso permiten servir el pastel sin desmoldarlo.
Vidrio templado
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Los moldes de vidrio tienen dos ventajas importantes: pueden utilizarse en microondas, y al ser transparentes es más fácil ver cómo progresa la cocción. Son muy útiles para preparar flanes, ya que la textura del vidrio permite desmoldar mucho más fácilmente un postre tan delicado. Son más fáciles de limpiar, aunque debes tener cuidado cuando los metas al horno tradicional, y permíteles unos minutos de reposo antes de refrigerarlos para que el cambio de temperatura no perjudique el material.
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