Casa María fue construida poco a poco, con el empeño y el cariño que se pone para alzar un paraíso. Se trata de un escondite en el campo perfecto para compartirlo con personas que buscan una experiencia única, cómoda y discreta. Los ambientes bien decorados, los servicios de spa y una cocina a fuego lento hacen de este espacio un sitio ideal para disfrutar la calma y el silencio.
No es un hotel de lujo; sin embargo, el lujo está en la experiencia que Casa María ofrece: sus espacios acogedores y de buen gusto, atención personalizada, el vigor de la naturaleza y la privacidad en compañía de Rosa (una burra madura y muy amigable) y su nieto Mingo.
Casa María: Una experiencia acogedora
El hospedaje consiste en cabañas ambientadas con objetos especiales atesorados a lo largo de distintos viajes. Refugios íntimos, acogedores y cálidos para descansar cuerpo, mente y alma, y crear nuevas memorias.
En Casa María no hay un restaurante formal, pero ofrecen comida estilo casero previa reservación. Todos los platillos están elaborados con ingredientes locales, saludables y en sintonía con la campiña. Tortillas hechas a mano, hortalizas del pueblo, quesos artesanales y huevos de nuestras las propias gallinas de la propiedad, que viven en libertad. ¿Quién no quiere desayunar con la vista puesta en aquellas matas de lavandas de donde salen tés, cocteles y un toque campestre que impregna esta cocina?
Preciosos jardines, naturaleza y wellness
El hotel ofrece servicios opcionales de spa: masajes, ritos ancestrales propios de la zona otomí, mascarillas a base de distintos productos naturales y plantas medicinales. También puedes solicitar alguno de los ritos holísticos de sanación que desde hace siglos practican los pobladores de la zona, y que renovarán tus energías, entregándote paz. Y por supuesto, no puedes dejar de probar el temazcal, de donde saldrás renovado.
Si has decidido tomarte un par de días para leer y escribir; si piensas en un fin de semana romántico; o si quieres que te consientan con los tratamientos holísticos de un spa de campo, clases de yoga y un temazcal, Casa María es el lugar ideal.
Dónde: Casa María. Antiguo Camino a Canalejas, Jilotepec, Edo. Mex. Más informes en el sitio web del hotel.
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