A pocos capítulos de haber arrancado la octava temporada de MasterChef México, los concursantes comienzan a sentir la tensión de la competencia. Uno de los retos más inciertos es la “caja misteriosa” que ha dejado a varios fuera de la contienda. Por eso, hoy recordamos las cinco cajas misteriosas más retadoras de todos los años.
Por Yulissa Arcos
Las exigencias del jurado cada vez son más específicas y quien no cumpla con el platillo siempre está en riesgo de usar el temido mandil negro. Uno de los retos más complicados es la “caja misteriosa”; puede esconder ingredientes exóticos o transportar a los concursantes a un recuerdo melancólico.
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1. Taco accidentado
En esta ocasión, la caja guardaba ingredientes poco difíciles: preparar un taco en homenaje a los trabajadores del campo era el reto. Al escuchar la señal, los concursantes se apresuraron al supermercado; contaban con tres minutos para adquirir lo necesario y ejecutar su platillo.
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Debido a la premura, Nallely Martínez, la favorita en repostería, se lastimó el pie al bajar un escalón. Aunque el dolor era inmenso, la concursante continuó con el desafío, pero al terminar fue auxiliada por los paramédicos. Tras someterse a una cirugía, la cocinera regresó algunos capítulos después.
2. Doble desafío
Durante Master Chef la Revancha, los participantes regresaron a la cocina con ánimos de ganar a toda costa, aunque sabían que no sería fácil. Cómo olvidar cuando se enfrentaron a dos cajas misteriosas: la primera contenía un antifaz que debían usar para abrir la siguiente.
Usando los sentidos de tacto, olfato y gusto, los cocineros seleccionaron 15 ingredientes de la segunda caja, en tan solo cinco minutos. Cuando pudieron ver, algunos estaban inconformes. Tal fue el caso de Miguel Reyes quien eligió pescado; el competidor no deseaba cocinar con este producto.
3. El que no arriesga no gana
Los participantes de la temporada 2018 también se enfrentaron a dos cajas; una de ellas era transparente y sus ingredientes invitaban a cocinar un delicioso sándwich. Sin embargo, aun quedaba una caja más, pero su contenido era secreto. La incertidumbre comenzó a crecer entre los cocineros pues debían escoger una.
Algunos argumentaban que la sencillez de preparar un sándwich haría que obtuvieran mandil negro; otros más decidieron irse a la segura. Lo que era cierto es que quienes eligieran la transparente cocinarían en 20 minutos, mientras que los demás tenían 50. ¿Qué contenía la caja de madera?
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El temor más grande
Los competidores de todas las ediciones de MasterChef México, han confesado su temor a preparar postres. Las técnicas empleadas, así como la cantidad de ingredientes, deben ser exactas para poder complacer al jurado. Y la caja misteriosa de la cuarta temporada tenía todo lo necesario para hornear un pastel de 4 capas.
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Más de un jugador comenzó a sudar, ¡nunca habían hecho un pastel y tendrían que cocinarlo en 90 minutos! Honorina Arroyo fue quien tuvo más problemas; su postre no terminó el tiempo de cocción, y terminó por derretirse. Los cocineros tomaron este hecho con risas y gran humor.
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La caja de terror
Al abrir el cajón de madera, los concursantes de MasterChef sintieron un fuerte escalofrío: había una pequeña lápida con su nombre grabado. Las lágrimas no se hicieron esperar en algunos rostros. Con melancolía, el chef Benito Molina les pidió que cocinaran aquello que les gustaría comer antes de morir; debía ser una preparación llena de historia, motivo y mucho sabor.