¡No solo de aceite de oliva vive el hombre! existen otras variedades que poco a poco toman el mercado. Entre los tipos de aceites que se han comenzado a comercializar se encuentran los de semillas y de frutos oleaginosos como el aguacate.
Aquí te dejamos algunos ejemplos de cómo usarlos en tu día a día.
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Aceite de aguacate
Este tipo de aceite es rico en ácidos grasos Omega-3, antioxidantes y vitaminas del complejo B. Se usa en frío, ya que en contacto con el calor pierde sus bondades, te recomendamos usarlo en ensaladas, tiraditos y cremas. También es un aliado para elaborar mascarillas, mantener el pelo, la piel y las uñas radiantes. Se puede usar como complemento alimenticio en smoothies y bebidas a base de fruta.
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Aceite de almendras
Además de su delicioso aroma, este aceite es rico en Omega-6, antioxidantes y minerales. Su continuo uso ayuda a mejorar la sequedad en la piel y el brillo del cabello. Se puede elaborar en casa con solo moler las almendras blanqueadas. Te recomendamos guardarlo en un lugar seco y con bastante ventilación, para evitar que se oxide. En cocina es perfecto para terminar ensaladas, hacer aderezos y para las verduras al horno.
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Aceite de cacahuate
Se utiliza bastante en la cocina oriental, su intenso sabor y una de sus bondades es que soporta altas temperaturas. Se usa para condimentar carnes, pescados, sopas y ensaladas. También tiene usos cosméticos, por ejemplo: si lo mezclas con yogur, puedes hacer una mascarilla para evitar la aparición de puntos negros.
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Aceite de semillas de uva
Es uno de los más caros debido a que no se elabora con frecuencia. Al igual que el mangostán, esta semilla tiene un alto contenido en polifenoles y carotenoides que son los que ayudan a evitar la oxidación celular. Se obtiene a través de un proceso de extracción de aceites en los granos de las uvas. Este tipo de aceite se consume en frío principalmente en ensaladas y aderezos. En cosmética evita el desarrollo de arrugas, da brillo a la piel y ayuda a desinflamar la piel.
Aceite de semillas de girasol
Tiene un alto contenido de ácido linoleico y Omega-6, los cuales ayudan a mantener en buen funcionamiento el sistema circulatorio y muscular. También es rico en vitamina A, D y E, que ayudan a mejorar la cicatrización y mantienen en correcto estado la salud de la piel. En cocina se usa para aderezar algunos platos con pescado y pollo; además de ser un complemento en diversos smoothies y bebidas energéticas.
