En Omakkami encontrarás una larga barra de sushi, elaborada de la típica madera clara de los barrios de Japón, nos espera tras una cortina de telas colgantes. Tradicionales elementos decorativos evocan los restaurantes de ese país, sofisticados pero simples a la vez. Al momento de adentrarnos en este espacio, uno de los secretos mejor guardados por los ‘kushinbos’ locales, comienza nuestra experiencia.
Por Melanie Beard.
‘Kuishinbo’ es un término japonés para los que amamos la buena gastronomía y comer platos deliciosos. Aficionados por el delicado y sabroso arte culinario japonés, los ‘kushinbos’ buscamos sin cesar esos lugares auténticos y únicos. Esta excelencia nos transporta a través de los sentidos a las sinuosas calles de Kyoto. También a los rascacielos de Tokyo y a la sombre de los imponentes buddhas de la costa de Japón.
En el centro de Cancún nos encontramos con una de estas joyas amadas por los ‘kushinbos’. Se trata de un escenario de experiencias culinarias singulares que recrean, en todo su esplendor, los sabores, técnicas y tradiciones de Japón. Omakkami es un edén culinario, uno de esos santuarios gastronómicos que los amantes de la cocina japonesa anhelamos siempre encontrar y cuya exquisitez queda por siempre plasmada en nuestra mente y corazón.
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El menú de Omakkami
El restaurante cuenta con diversos proveedores especializados que aseguran los ingredientes más frescos. Por ello, el menú de Omakkami luce todo tipo de nigiris, temakis, sashimis, hosomakis, uramakis, futomakis, tsumamis y donburis. Por ello son elaborados con ingredientes como el salmón, el atún, la anguila, el hamachi, los camarones, las almejas, los callos de hacha, los ostiones y el pulpo.
Desde platillos más elaborados y complejos como las almejas preparadas, hasta los clásicos nigiris de diversas partes del atún. Maridando los platillos con una excelente selección de sakes japoneses o tés verdes acentúa todavía más la autenticidad de la experiencia.
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Perfectamente logrados, los rollos también pueden ser disfrutados con fusión mexicana, incluyendo ingredientes como aguacate y mayonesa picante. El maki unagi, de anguila por dentro, aguacate por fuera y salsa de anguila con semillas de sésamo, fue uno de mis favoritos. No pueden dejar de probar el delicioso ostión con ikura y salsa ponzu – exquisito y fresco.
Utilizando los estilos de cocina de Edo y Kyushu, las mentes brillantes que crearon Omakkami han asegurado que cada uno de sus platillos nos seduzcan con la frescura de sus ingredientes. Elocuente en el seductivo lenguaje de la gastronomía japonesa, el chef Randy Tun expresa su pasión por el arte culinario en cada exquisito bocado.
