El café es una bebida preferida sin importar el lugar del mundo en donde te encuentres. Entre las múltiples variantes que existen, el café lungo, el espresso y el americano destacan por sus perfiles de sabor únicos y métodos de preparación. Aunque a simple vista podrían parecer lo mismo, la realidad es que tienen características específicas que los hacen versiones únicas.
En este nota, exploraremos en detalle las diferencias entre estas tres populares opciones de café. Así podrás conocer las propiedades tanto a nivel olfativo como gustativo del lungo, el espresso y el americano.
Por: Desiree Perea
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Existen distintos factores a nivel preparación que ayudan a identificar fácilmente un café lungo, un americano y un espresso. Sin embargo, a simple vista, también es posible reconocerlos. Diferenciar entre cada estilo es una gran forma de entrenar al sentido del olfato y del gusto. El poder de ambos es realmente interesante y puede comprobarse a través del análisis de cada uno de estos cafés. Ningún estilo está peleado con el otro. Simplemente es cuestión de gustos.
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También podemos destacar similitudes entres estos estilos, pues sí las hay. Por ejemplo, estas tres bebidas dejan brillar al café por sí solo. Esto quiere decir que por ningún motivo deben llevar leche u otro ingrediente. Por más mínima que sea la cantidad de un ingrediente lácteo, entonces ya estaríamos hablando de un macchiato, un cortado o hasta un affogato (este lleva una bola de helado de vainilla).
Entender las diferencias entre el café lungo, el espresso y el americano te permite apreciar cada una de estas deliciosas bebidas de café por lo que son. Ya sea que prefieras la intensidad de un espresso, la suavidad de un lungo o la ligereza de un americano. Hay una opción perfecta para cada amante del café. Vale la pena degustar con cada uno para así descubrir cuál se adapta mejor a tus gustos y preferencias.