1. Elige el tipo de calabaza correcto

2. Tratamiento para la pulpa

3. Método muffin

4. Tiempo de horneado perfecto

Practicar repostería en casa es una actividad recurrente sin importar la temporada. Sin embargo, durante el otoño y el invierno se vuelve un momento de relajamiento que se suman al estilo de vida de miles de persona. Dentro de las miles de exquisitas recetas que se conocen, el panqué de calabaza es prácticamente un postre casero obligatorio. Su nivel de dificultad no es alto, además de que es fácil de personalizar. En esta nota, te compartimos sobre los secretos detrás que te ayudarán a dominar este postre otoñal en casa.
Por: Desiree Perea
Te podría interesar: ¿Cómo puedes sustituir el huevo en recetas de postres?
Pocas recetas gritan otoño tanto como el panqué de calabaza. Así como el pumpkin spice latte es la bebida por excelencia en este momento del año, este postre se convierte en la estrella de la repostería casera. Es una excelente forma de disfrutar de un antojo dulce y aromático. Es crucial seguir la receta al pie de la letra, desde las porciones hasta el tiempo.
Te podría interesar: 5 postres con peras que puedes preparar en otoño
En cuanto sale del horno, prácticamente está listo para degustar, pero hay formas de llevarlo al siguiente nivel. Un glaseado equilibrado es una forma perfecta de terminar y presentar al panqué de calabaza; este elemento también funciona como pegamento para mantener frutos secos en la parte superior:
Si prefieres un postre menos dulce, se puede optar por un ganache de chocolate semi–amargo o crema de cacahuate. En este paso, la creatividad personal tiene el control por completo.
El panqué de calabaza se ha convertido en un postre clásico e imperdible durante el otoño. Gracias a que en este momento del año brilla esta hortaliza, vale la pena aprovecharla al máximo. Si estás decidido a poner a prueba tus habilidades reposteras, esta receta es una excelente opción para aquellos en nivel principiante. Aunque a simple vista parece sencillo, es crucial seguir el procedimiento para asegurar una pieza suave, húmeda y exquisita.