“Testarossa”, un speakeasy con mucha aventura en Polanco

Como todo buen speakeasy, “Testarossa” está estratégicamente ubicado hacia la parte trasera del restaurante, en Polanco, un concepto creado para los aventureros y amantes de la comida y la vida nocturna.

Por Armando Caso.

Aquí te presentamos la nueva propuesta para probar originales cocteles en la “Cedemequis”. Ya sea antes o para después de la fiesta. Se trata de Testarossa un pequeño submarino de color rojo con grandes espejos que hacen la vez de ventanas, que nos remonta de algún modo al Nautilus, en la novela de Julio Verne Veinte mil leguas de viaje submarino. que le dan ese que “Testarossa” no está en el fondo del mar, aunque pareciera; sino el en segundo piso, de la esquina de Aristóteles y Masaryk.

De su menú de bebidas sobresalen sus signature drinks como el Martini de Tamborines. Sí, ese dulce masticable, que tanto les encanta a los niños. La mezcla única y deliciosa de picante dulce sabor tamarindo y chile es vertida en un “shaker” lleno de hielo y servida en una copa de Martini con crusta de los mismos Tamborines.

Mención honorífica al Yakuza que no se trata de la mafia más temida de Japón; sino del coctel favorito de la casa. Éste aromático coctel, está preparado a base de guayaba, té verde y mezcal. Viene servido en una copa tipo tiki en forma de búho.

Otros cocteles que no te puedes perder son: Jarrito Negro, Margarita De Yuzu, Jamaica Style o “Jamaiquita” y los clásicos negroni, Whisky Sour, Mahattan, Moscow Mule, entre otros. Todos preparados con destilados de gama premium.

De su menú de alimentos, todos son servidos en porciones pequeñitas; simplemente para mover el diente entre coctel y coctel. Sobresalen los elotes Tempura, que es la fritura rápida típica japonesa, acompañada de mini hojas de mini de pequeñas coles de Bruselas y exquisito foie.

La estrella del menú para mi fueron los nuggets de pollo de la manera más “fancy” que había probado jamás: Vienen acompañados de la clásica kétchup de Heinz, en su presentación mini, pero compuesta con aceite de trufa. Para acompañar, un dip de french onion y caviar “on top”.

Hacia el final de la noche, nunca pueden faltar los tacos. No es necesario abandonar el lugar. En su carta hay también, unos deliciosos tacos de trompo de res que están incluso mejor que los de muchas taquerías “after hours”.

¿Dónde?
Esquina, Aristóteles 124, Polanco, Miguel Hidalgo, 11560 Ciudad de México, CDMX

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