El verano en República Checa será motivo de festejo por las diversas actividades que planean para celebrar a esta espectacular nación.
Los malabaristas, los arlequines, las justas de los caballeros alentados por las doncellas, el olor a carne asada y una cerveza espumosa son costumbres que hoy en día podrían parecer de cuento o anacrónicos, pero el verano en República Checa de este año brindará la oportunidad a los visitantes de la Bohemia y Moravia revivir la época Gótica, pasando por el Renacimiento y hasta el Barroco.
Y es que, en este año, República Checa festejará los 700 años del nacimiento del monarca Carlos IV, uno de los reyes más queridos y recordados gracias al incomparable crecimiento que propició para los territorios hoy en día checos. Tal ha sido el impacto del regente que la capital del país, Praga, tiene el Puente de Carlos y el Castillo de Praga, dos monumentos históricos que engalanan las vías principales.
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La figura de Carlos IV cuenta con la magnitud suficiente que para el verano en todo el territorio checo se realizarán cinco festividades principales:
Del 22 al 24 de julio la provincia de Holašovice, al Sur de Bohemia, se llevarán a cabo las Fiestas Rústicas, donde más de doscientos artistas y artesanos abarrotarán las calles para ofrecer a los niños distintas experiencias que los remontarán a la vida medieval.
El popular cuento de hadas Olomouc, en Moravia Central, será el motivo central de las Fiestas Barrocas del 29 de junio al 22 de julio, donde podrá vivirse desde la ópera barroca hasta una réplica única de teatro de la época.
El castillo medieval de Loket, situado en Bohemia del Oeste, y donde estuvo recluido por las órdenes de su padre, también fue un sitio recreativo en el que un día encontró una ciudad balneario. Las fiestas municipales que se llevarán a cabo el 13 y 14 de agosto. El patio del castillo contará con combates de esgrima, básica medieval, mercados y tabernas para satisfacer a los espectadores además de la exposición que estará dedicada exclusivamente al mandatario.
Las fiestas históricas, 19 y 20 de agosto, se celebrarán en Telč y serán presididas por Zachariáš de Hradec y Kateřina de Valdštejn, quienes, como benefactores, desarrollaron un monumento arquitectónico inspirado en el Renacentista italiano, y que logró entrar a la limitada lista de la herencia cultural mundial a pesar de ubicarse en las Tierras altas.
El 15 de agosto del año 1645 concluyó el asedio de la ciudad por parte de las tropas suecas. Las huestes volverán de forma metafórica durante el día de Brno al ver cómo las calles de la ciudad se llenan de ejércitos que marcharán al par que se representan al pie de la montaña de Kraví con 250 participantes, con lo que se conmemorará la memoria de los hombres que liberaron la toma de las tropas suecas.
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