Los humanos hemos tenido que adaptarnos o morir a diferentes modelos de alimentación en toda nuestra historia evolutiva. La presión generada por el ambiente ha […]
Los humanos hemos tenido que adaptarnos o morir a diferentes modelos de alimentación en toda nuestra historia evolutiva. La presión generada por el ambiente ha logrado que desarrollemos una capacidad flexible al momento de comer y sobrevivir. Conocer nuestra historia alimentaria puede ayudarnos a tomar mejores decisiones. He aquí algunos datos sobre los cambios de alimentación que se han dado en el tiempo:
El Ardipithecus Ramidus hace 5 millones de años se alimentó de plantas, frutas, bayas, insectos, algunos tallos y raíces. Después, los Australopithecus hace 3.5m de años comieron tubérculos, bulbos y semillas.
El Homo Ergaster hace 1.5m de años incluyó carroña, huevos, miel, insectos, peces y vegetales en su alimentación.
Por su parte, el Homo Sapiens Sapiens hace 200.000 años comió peces y frutos del mar, además de carnes, huevos, vegetales y frutas estacionales.
Pasó el tiempo y hace 12.000 años se comenzó a practicar la agricultura (durante en el Neolítico) y, con ella, la alimentación volvió a cambiar; comenzó el consumo de cereales al igual que de algunos animales domésticos como las cabras y las vacas.
Desde este punto se conoce que la alimentación del neolítico contribuyó a cierto declive de la salud. Muy recientemente, (hace apenas unos 200 años en Europa), la Revolución Industrial nos trajo los alimentos ultraprocesados, refinados y empaquetados. La alimentación de los humanos modernos basada en granos, cereales, ultraprocesados y refinados ha acentuado el empeoramiento de la salud, según dice la medicina darwiniana.
Tal parece que los humanos están teniendo un «desajuste» entre lo que han comido a través de millones de años con su alimentación actual. De hecho, la propuesta de esta rama de la medicina es la siguiente: vuelve a comer lo más parecido a lo que han venido comiendo los humanos a través de millones de años y evita en mayor medida muchos de los alimentos ultraprocesados o modernos.
No todos los productos nuevos son malos, algunos lácteos, o complementos como el «Life Fuel» de Biohack o incluso su «Biodynamic Coffee» pueden ayudarte a tener una mejor salud. De esta manera, en el mejor de los casos, puedes prevenir o incluso mejorar muchas enfermedades de la civilización actuales.