Lo mismo por economía, que por salud y medio ambiente: por estas razones no deberías comprar frutas y vegetales empaquetados.
Sabemos que te ha pasado: vas al súper, llegas a la sección de frutas y verduras, y ves las que necesitas pero, en vez de venir ‘sueltas’, debes comprarlas en paquete. Y lo haces, si es que no hay opción, ¿cierto? Ahora bien, ¿sabes por qué es mejor evitar comprar esas frutas y vegetales empaquetados? Te decimos ahora mismo las razones.
Por Gourmet de México
En la actualidad, hablar de alimentos frescos y sanos está de moda. Y no es fortuito. Está comprobado que consumir comida fresca y bien preparada, es mucho mejor para la salud que cuando se trata de alimentos conservados de formas no tan naturales.
Si vives en Corea del Norte y de pura casualidad encuentras chiles chilhuacles empaquetados, seguro será como ver un oasis en el desierto y los comprarás de cualquier forma, porque difícilmente los encuentres en otra presentación estando tan lejos.
Pero si resides en México, que es uno de los 25 países megadiversos del mundo, es bastante probable que lo que estés a punto de adquirir empaquetado, también lo puedes encontrar mucho mejor y quizá hasta a menor precio, en un tianguis o mercado de confianza.
Mira por qué debes evitar la práctica de comprar en paquete todo lo que debería ser fresco.
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Al comprar alimentos empaquetados en materiales no biodegradables, sin duda aportas en cierta medida a la contaminación del planeta. Si revisas bien en qué recipientes vienen tus fresas, kiwis y hongos favoritos, te darás cuenta que traen aparejada una cantidad considerable de plásticas totalmente innecesarios.
En vez de eso, opta por ordenar tus días de compras y mejor consigue los mismos insumos en tu tianguis de la zona o en algún mercado fijo donde ya sepas que los encuentras de gran calidad.
Cuando dejas de consumir alimentos que se venden dentro de bolsas y más bolsas, lo más seguro es que el dinero que inviertes en ello sí llegue más directamente a quienes los producen.
Esto significa, que puedes apoyar de forma segura al comercio local del sitio donde vives. No es lo mismo adquirir elotes amarillos empaquetados –incluso con marcas que tienen nombres en español, pero que tienen origen en otros países–, que ir a una verdulería a conseguirlos por pieza y hasta con hojas. De esta manera, hasta puedes aprovechar su recubrimiento natural para envolver tamales.
Cada vez que se incentiva el campo mexicano, las especies que están en peligro de desaparecer por su poca demanda, tienen más posibilidades de salvarse porque la actividad agrícola se reactiva gradualmente.
Eso se nota a leguas. Sentimos decirte esto pero, la comida que viene dentro de bolsas, por mucho que esté dentro de refrigeradores en el súper, debe mantenerse en perfecto estado por mucho más tiempo y ello implica que muchas veces se le preserve con aditivos.
Otra cosa que asegura que las frutas y verduras no se echen a perder tan pronto es que muchas de ellas ya están genéticamente modificadas. Como ya lo sabes, eso termina siendo muy perjudicial para la salud de quienes las consumen.
Haz el experimento pronto: compra un alimento ‘emplayado’ en el supermercado y uno sin empaquetar, en el tianguis, y evalúa todas sus características. Te aseguramos que podrás darte cuenta sin ningún problema de cuál se ve más fresco que el otro.
Aunado a esto, date cuenta cómo influye eso en el sabor. Un producto, no importa cuál sea, cuando viene directamente de la tierra, de la planta o el árbol donde originalmente crece, sabe mucho más intenso y más rico. ¿Te ha pasado que compras una manzana hermosa, brillosa y perfecta, pero que al morder no tiene el mínimo sabor ni olor? Eso podría tener una explicación en lo que te contamos.
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Aunque no es una regla definitiva, es bastante más seguro que al comprar sin sellos tus vegetales estés adquiriendo productos más naturales que, por consiguiente, le pueden dar mucho más nutrientes y calidad de vida a tu cuerpo.
Encima, si haces cuentas, hasta sale más barato a la larga.
Pon a prueba los cinco puntos que te recomendamos para beneficiarte de comprar frutas y verduras empaquetadas, y cuéntanos cómo te va. ¿Apoco no es gratificante saber que ayudas a que el planeta y la salud tuya y de tu familia se beneficien al mismo tiempo?