Colmillo Masaryk, un lugar de culto a la gastronomía norteña callejera
Conocimos Colmillo Masaryk, un restaurante de culto a lo mejor de la gastronomía callejera del norte del país, Monterrey, Los Ángeles y Nueva York.
Conocimos Colmillo Masaryk, un restaurante de culto a lo mejor de la gastronomía callejera del norte del país, Monterrey, Los Ángeles y Nueva York.
Por Roxana Zepeda.
El restaurante, a cargo del chef Gerardo Soto llegó a Polanco para brindar una exclusiva experiencia gastronómica, altamente adictiva bajo un nuevo concepto.
Colmillo Masaryk toma muchos platillos tradicionales norteños mexicanos y de las grandes ciudades de Estados Unidos para revolucionarlos y ofrecer a los comensales una propuesta única e innovadora. La fusión de estos sabores, técnicas, ingredientes y experiencias permiten ofrecer los mejores cortes de carne americana y una variedad de deliciosos tacos, desde filete de res hasta trompo de cerdo típico de los tacos al pastor.
El chef Gerardo Soto le da un giro innovador a platillos tradicionalmente callejeros llevándolos al siguiente nivel.
Al llegar a tu mesa te recibirán con un plato de salsas, totopos, tostadas y frijoles refritos con topping de quesillo. Después uno de los meseros llegará a preparar a tu mesa una salsa de molcajete hecha con jitomates y chiles asados.
En este lugar se ofrecen botanas inigualables, como el guacamole bar con distintos acompañamientos de queso, chicharrón y otros complementos, además de su icónica col asada con aderezo de carne, pistache, parmesano y aceite de trufa, una entrada que debes pedir cuando visites Colmillo.
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Uno de los ingredientes secretos que te enloquecerá es el “Chicharrón de la Ramos”, un tipo de chicharrón con carne crujiente que es típico de Monterrey y que lo encontrarás presente en varios de los platillos, desde el guacamole hasta una deliciosa gringa hecha en tortilla de harina con queso y salsa picosita.
Sus originales entradas te harán salivar, como el granielote con chicharrón de la Ramos, el durito de camarón curtido en salsa valentina con guacamole, el chicharrón de queso menonita o las puntas de filete Black Angus con salsa casera de chipotle.
Los sashimis de pescado fresco son una delicia, hay laminitas de Hamachi con ponzu de chiles toreados, edamames y arroz, también sashimi de salmón con pimienta rosa y aceite de trufa. Uno de los imperdibles es el atún con salsa rasurada. Tampoco te puedes perder las tostadas de ceviche y otros pescados y mariscos.
Los cortes de carne los encontrarás con hueso y sin hueso: cabrería Black Angus, Porter House Prime, Short Rib en cocción lenta, Rib Eye y medallones de filete, entre otros, acompañados por diversas guarniciones y salsas, te recomendamos la mantequilla de ajo rostizado con tuétano y trufa.
De los platillos al carbón no te puedes perder la hamburguesa de trufa o el pollo black con aceite de Habanero. También las especialidades de mar como el pulpo búfalo a las brasas o el Kampachi al carbón con talla de piquín y talla de chipotle.
Casi todos los postres de este lugar son gigantescos, ideales para compartir entre 4 o 5 personas (son de 500 a 800 gramos de dulce adictivo), el postre icónico de Colmillo es literalmente un pastel de boda de tres leches, aunque el Carrot Cake con salsa de caramelo y pretzel no decepcionaría a nadie. Si eres fan del pay casero de limón aquí encontrarás uno delicioso, pero si buscas algo más pequeño solo para dos, te recomendamos las oreos fritas con helado de vainilla o los Ferrero fritos.
La carta incluye la mejor selección de vinos salvajes, los tragos se sirven con el formato de bar en la mesa y sus cervezas se mantienen enterradas en hielo, por ello son reconocidos como la cerveza más fría del país.
La arquitectura e interiorismo de Colmillo Masaryk, curada por la Arq. Alejandra Sarmiento, de la oficina de arquitectos Sarmiento Legorreta, crea una atmósfera oscura, elegante y sensual, con tonos musicales que van desde el funk de los 70’s, pasando por “Old-hip-hop-School”, un poco de rock experimental y sonidos electrónicos del viejo mundo. Sus grandes ventanales abiertos convierten a este lugar en una gran terraza con excelente ventilación por todos sus ángulos.
Aristóteles 124 Piso 2, Polanco CDMX.
55 5038 6236