Apasionada del vino mexicano; colombiana de nacimiento, mexicana de corazón; mamá, mujer y empresaria. Bibiana Parra es una inspiración a seguir en todos aspectos. Platicar con la socia fundadora y directora de marketing de Tomemos Vino -una plataforma de difusión del vino mexicano de distintas regiones del país- y fiel promotora de las etiquetas nacionales, resulta embriagante.
Tuve la oportunidad de charlar con Bibiana sobre su labor y pasión por el vino mexicano. Hablamos de Tomemos Vino, la fantástica Vinícola Santa Elena en Aguascalientes y la creciente industria enológica mexicana.
Bleu & Blanc: Bibiana, tienes una carrera impresionante en el mundo del vino.
Tengo 17 años en la industria de vinos y licores. Empecé trabajando en Bodegas La Negrita como brand manager de licores. Luego me dieron los vinos de Bodegas Torres Chile, y poco después me fui a Monte Xanic. Una empresa que llevo en mi corazón y donde gracias al Doctor Hans Backhoff, su hijo y al equipo que estaba que en ese momento en la vinícola, fue que nació mi amor por el vino mexicano.
Luego en mi afán por seguir creciendo en conocimiento y experiencia en el mundo del vino desempeñé el cargo de directora comercial en una importadora (Cavisa). Propuse tener en su portafolio -que comprendía vinos chilenos, franceses, españoles y californianos- también vino mexicano, pero de una nueva región enológica del país ya que vi un área de oportunidad comercial en esta propuesta.
Así que emprendí mi búsqueda empezando por Aguascalientes, porque sabía que tenía las condiciones climatológicas para cultivar uva para hacer vino –Vitis vinífera-. Ahí conocí a Ricardo Álvarez, dueño de Vinícola Santa Elena, quien me dijo: “Listo, llévate una caja de cada uno de mis vinos, pruébala en Ciudad de México a ver cómo te va”. La verdad me fue súper bien, la aceptación fue maravillosa por parte del canal on trade y de gran sorpresa en cuanto a relación calidad–precio.
Finalmente, no se concretó nada con la importadora y al regresar a darle la triste noticia en persona a Ricardo, él me propuso que por qué no posicionaba y distribuía Santa Elena con mi esposo, Arturo Schoelman en CDMX. Y pues gracias a él, su confianza, su visión, y la gran química que tuvimos con su familia y la bodega desde el día uno, fue que nos decidimos a cumplir uno de nuestros sueños y proyectos en pareja … ser empresarios y en mi caso personal, poderle regresar a México un poco de lo mucho que me ha dado en casi ya 24 años de radicar en este hermoso país…. Y lo hicimos. Así nació Tomemos Vino.
Mi perfil en redes sociales se llama La Vid de Bibi, porque mi vida ha girado de una manera u otra en torno a los vinos. Hasta mi apellido casualmente es Parra. El vino para mí es unión, es trabajo en equipo, es diversidad, es energía embotellada, el vino te habla, el vino conecta todos tus sentidos. Simplemente solo puedo dar gracias de hacer una de las cosas que más me inspiran en mi vida a seguir aprendiendo, de conocer personas en el camino con unos conocimientos tremendos que hoy también puedo decir que son mis amigos y parte de mi vida.
Es un privilegio comunicar y acercar a las personas a éste fascinante mundo y poder compartirlo con todo el que le interese.
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B&B: Háblame de Tomemos Vino.
Nace justo por el amor de una pareja por el vino mexicano. Decidimos crear esta empresa para posicionar no sólo Baja California -porque sí manejamos una bodega de esa región, la Vinícola Torres Alegre y Familia– que produce vinos naturales, sin correcciones químicas y libres de plástico y que sin duda es de los mejores representantes de esta zona gracias a las manos y mente de su enólogo. El Doctor Víctor Torres Alegre es reconocido por sus procesos innovadores en la elaboración de vinos blancos.
El objetivo de Tomemos Vino es traer a la mesa del consumidor vino de otras regiones de México que no están generalmente en carta en los restaurantes. Iniciando justo con Santa Elena de Aguascalientes, siguiendo con Torres Alegre de Baja California y actualmente con Bodegas Pinesque de Chihuahua misma donde me enorgullece que su enóloga sea una joven chihuahuense. Con Monica Pinocely hubo una gran empatía tanto personal como laboral.
Vino Del Viko 2017: Cabernet, Nebbiolo y Syrah, de Torres Alegre y Familia
Además de la distribución, tenemos un marcado interés en promover la constancia y la calidad de las etiquetas, y la relación precio calidad para acabar con esta creencia de que todo el vino mexicano es costoso.
También estamos promoviendo el consumo de vino entre mujeres porque, de hecho, nosotras somos las que estamos aportando varios granitos de arena para que el consumo del vino al día de hoy este en 960 ml respecto a 4 años atrás donde se consumían a lo mucho 750 ml. Las mujeres, la industria, los restaurantes, los constantes eventos, la gran oferta de etiquetas y la correcta comunicación del vino sin tanto bluff y esnobismo es lo que está ayudando a cambiar la percepción del consumidor final hacia el vino.
En mi caso mi idea es hacer que su encuentro con el mundo enológico tenga por supuesto un respaldo respeto a conocimientos, pero también que sea divertido, dinámico y fácil de absorber
B&B: Claro, el vino es para cualquier ocasión, y además es mucho más nutritivo que un refresco, por ejemplo,
El vino es un gran acompañante de la comida, nos ayuda en la parte de salud y es algo bueno para el organismo. Claro, siempre con mesura. Nada en exceso es bueno. Aporta minerales de diferentes terroirs, vitaminas, taninos, micronutrientes que hacen mucho por nuestra salud y nuestra belleza jaja.
Vino 5 de Pinesque 2015: Syrah y Cabernet Sauvignon, de Bodegas Pinesque en Chihuahua. Ganador de Medalla de Plata en el Concurso Mundial de Bruselas 2018
B&B: ¿Qué canales de distribución tienen?
Tomemos Vino tiene cuatro canales de distribución. Uno es el canal (Horeca) en centros de consumo, hoteles y tiendas especializadas. Otro canal es el de los grandes almacenes. Por ejemplo, le hacemos el vino a Soriana -blanco y tinto- y estamos también en Costco con Torres Alegre y con Santa Elena, lo cual es un gran logro por el hecho de permitir que la región de Aguascalientes esté representada en este canal tan importante. Además distribuimos a privados, corporativos, caterings, y hacemos regalos personalizados.
Por último, tenemos la parte de experiencias. Organizamos catas, viajes enogastronómicos, experiencias en torno al vino donde una de las que más han gustado es la que creamos entre Pilar Álvarez fundadora de El Nido y yo, donde maridamos flores, brotes y vino. El resultado ha sido maravilloso y muy interesante, ligado justo a mi filosofía de innovar en la forma de vender y acercar al consumidor final. Porque justo lo que queremos es cambiar ese chip, que no sea la misma cata de siempre. La verdad es que están muy divertidas.
B&B: En efecto, como mencionabas, ya no todo es Baja California en materia de vinos. ¿Qué otras regiones están creciendo?
Si hablamos del 2002, se destacaban cuatro zonas principalmente: Baja California, Querétaro -que se especializa sobre todo en vinos espumosos-, Sonora y Coahuila. Actualmente tenemos 12 zonas productoras de uva para vino, sumándose Aguascalientes, San Luis Potosí, Guanajuato, Zacatecas, Nuevo León, Jalisco, Baja California Sur y Chihuahua -que para mí, va a ser dentro de cuatro años el futuro del vino mexicano-.
Es un estado que no está todavía tan aprovechado con viñedos, pero los que hay están haciendo cosas de calidad impresionante. El clima favorece muchísimo, la región es enorme y aparte al parecer hay apoyos por parte del estado. México tiene mucho que dar, y estamos a favor de que se planten cada vez más hectáreas de uvas. Porque el problema muchas veces es que se acaba la uva, no hay suficiente producto para poder tener la demanda que quizá el mercado pide, y por eso España nos sigue ganando en cuanto a desplazamiento. Necesitamos más vino mexicano de calidad.
Vino Sophie 2012: Nebbiolo, de Vinícola Santa Elena
B&B: Noto en ti un amor enorme y especial por Aguascalientes y por Vinícola Santa Elena…
Cómo no estar enamorada de ellos, si hemos estado creciendo juntos paso a paso y no es por presumir, pero están haciendo las cosas muy bien. Vinícola Santa Elena, junto con el grupo de socios, abrió un espacio que se llama Centro de Valor donde apoyan a todas las personas que quieren empezar a hacer vino o que tienen uva plantada, dándoles las herramientas y asesoría necesaria para elaborarlo correctamente. Hay emprendedores que admiro mucho pero que se ponen a vinificar en su casa, por ejemplo y al no tener las herramientas necesarias pueden tener efectos negativos en el resultado final del vino. Y eso es súper negativo tanto para la industria como para la región, así que aplaudo mucho esta iniciativa de la bodega.
Otra cosa que me da mucho orgullo es la tecnología y la innovación que han puesto en las vinícolas de Aguascalientes. Y, mejor aún, que se busca apoyar el desarrollo de toda la región. Por ejemplo, los tanques de vinificación de Santa Elena son hechos en el estado, entonces le dan trabajo a los locales creando una activación económica muy positiva para la region. Es un tema de producir con un impacto social. El vino mexicano, al igual que la gastronomía, la cultura y sus maravillosos destinos, es algo de lo que debemos enorgullecernos.
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B&B: ¿De qué otra cosa te sientes orgullosa, además de ser una inspiradora promotora del vino mexicano?
Soy mamá, y es algo que me gusta compartir, porque muchas mamás a lo mejor se olvidan de cumplir sus sueños por ser madres. Y las entiendo, no es nada fácil combinar todos los roles. Pero me siento orgullosa de decir que soy una buena madre, una buena esposa y una gran empresaria. Creo que todo se puede equilibrar en la vida, y es un gran ejemplo para nuestros hijos que vean que las mamás también trabajamos, creamos, proponemos y que estamos cada vez en un mundo con mayor igualdad y oportunidades para tod@s .
Sofía nuestra nena de 7 años va desde los 3 meses acompañándonos a todos los eventos de vino, y al día de hoy se ha convertido también en parte del equipo Tomemos Vino.
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