En este medio amamos al guarapo. Y hay muchas razones por lo que es así. De entrada, es delicioso. De salida, tenemos que reconocer que si bien es una bebida que se explica solo gracias al azúcar de caña, también es cierto que tiene mucha historia más allá de las zonas cálidas de América y su relación con el campo. ¿Qué tanto sabes del guarapo y por qué lo amamos en México?
El guarapo, hijo de la caña de azúcar
Esta bebida no es mexicana. No al menos de origen estricto. Sin embargo, se le consume en estados costeros (y muy calientes) como Puebla, Veracruz, Oaxaca, Chiapas y hasta Tabasco. Consiste en jugo puro de caña prensada por métodos físicos muy contundentes, al que se le agregan cubos de hielo y, a veces, hasta aguardiente.
En este video puedes ver un poco de cómo probamos el guarapo, aunque no en México. Hace poco viajamos a La Habana y encontramos que también ahí lo producen de manera artesanal. Fuimos a una guarapería y lo probamos recién exprimido. Así como lo ves en el video, es como llega a tus manos si lo consumes en un lugar así.
El guarapo para la sed (y con un poco de magia)
La bebida que hoy nos ocupa tiene un lugar importante entre los campesinos de las zonas donde se le produce. La razón es sencilla: se trata de una salvación ante el calor sin tregua de los lugares calientes de donde proviene.
Imagina estar bajo el calor más seco y menos agradable del lugar caliente de tu preferencia para vacacionar. Ahora imagínatelo igual, pero con un vaso de guarapo helado en mano. ¿No crees que así sería siempre mejor (y más saludable la vida?).
