La cocina de mar mantiene a estos moluscos como ingredientes favoritos. Las almejas y los mejillones presumen características únicas que hay que conocer.
La cocina de mar mantiene a los moluscos como uno de los productos estrella a nivel internacional. Explorar dicha la categoría, permite encontrarnos con tres tipos: gastrópodos, bivalvos y cefalópodos. En esta nota, nos centraremos en la segunda categoría, específicamente en los mejillones y las almejas. Ambos están protegidos por una concha rígida, pero esto no es indicativo de que sean iguales. A continuación, te contamos sobre la anatomía, propiedades y usos dentro de la cocina propios de cada especie.
Por: Desiree Perea
A simple vista, es sencillo identificar entre estos moluscos. La concha de los mejillones es alargada y suele encontrarse en tonos de azul oscuro, negro, café. La superficie de la concha suele ser lisa; aunque algunas piezas pueden presentar estrías o líneas de crecimiento.
Ahora, la apariencia de las almejas es completamente diferente. La concha mantiene una forma más ovalada o redondeada. Ambas valvas suelen ser de tamaño similar, permitiendo un cierre perfecto. Su coloración es generalmente más clara: blanco, beige, café claro o gris.
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Adentrándonos un poco en su hábitat, aquí también se encuentran diferencias puntuales. Las almejas viven enterradas en sedimentos blandos como: arena, grava o fango; tanto en aguas saladas como dulces. En cuanto a los mejillones, estas especies viven adheridos a superficies duras. Se les encuentra formando densas colonias en rocas, muelles, boyas.
También es importante hacer énfasis en sus propiedades, pues cada uno presume nutrientes diferentes. Las almejas son una fuente importante de Vitamina B12, hierro, ácido fólico y proteínas. Son bajas en calorías, por lo que su consumo es ideal para personas que están enfocadas en bajar en peso. Por otro lado, el consumo de mejillones aporta Omega-3, yodo y zinc.
Dentro de la cocina de mar es común encontrar recetas frías y calientes. Dentro de la primer categoría, las almejas y ostiones son una de las opciones favoritas. Sin embargo, los mejillones no suelen consumirse crudos; de hecho, funcionan a la perfección para la profundidad de sabor en guisados, caldos y arroces.
Para ambos casos, es fundamental asegurar llevar a casa piezas estén buen estado. Asegúrate de que las conchas estén cerradas antes de cocinarlos. Si alguna está abierta y no se cierra al tocarla, deséchala. Al comprar almejas y mejillones, lo ideal es prepararlos el mismo día. Deben mantenerse en refrigeración hasta el momento que decidas cocinarlos.
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Reconocer las diferencias entre mejillones y almejas es fundamental para apreciar la riqueza y diversidad de los productos del mar. Desde sus características visuales, hasta su sabor y aroma, cada uno de estos alimentos puede encontrar un lugar dentro de la cocina en casa. Vale la pena diferenciar entre ambas especies para aprovechar al máximo sus propiedades en los platillos correctos.