Dieta para hígado graso: tips para seguirla correctamente

Cuando mantenemos una dieta sin restricciones con el tiempo, comenzamos a observar ciertas decadencias que afectan nuestro organismo. Lo mismo ocurre si nuestra dieta carece de equilibrio y, además, la falta de actividad física. Pueden surgir ciertos padecimientos que podrían prevenirse desde el principio. Por esta razón, hablaremos de la dieta para hígado graso, específicamente en la dieta y algunos tips para seguirla correctamente.

Por Mariana Frias

El hígado es el órgano que ayuda a digerir los alimentos. Almacenar energía y eliminar las toxinas. La enfermedad por hígado graso es una afección en la que se acumula grasa en el hígado. Existen dos tipos hígado graso no alcohólico y hígado graso por alcohol, también llamada esteatosis hepática alcohólica.

La acumulación de grasa en las células hepáticas, conocida como hígado graso, está asociada a diversos factores de riesgo. El sobrepeso y la obesidad, el aumento de los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre, así como la resistencia a la insulina en la diabetes tipo 2.

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La dieta para el hígado graso en un principio es la pérdida de peso gradual. Así como reducir la ingesta de grasas saturadas y azúcares. Puedes personalizar el plan de alimentación según el funcionamiento del estado en el que esté la enfermedad. No se trata simplemente de dejar de consumir grasa, sino de controlar la cantidad de energía que se ingiere y a través de los alimentos que se consumen.

Muchas veces se recomienda seguir la dieta Mediterránea tradicional. Esta dieta se caracteriza por el consumo mayoritario de alimentos de origen vegetal como frutas y verduras de temporada, cereales integrales, frutos secos y legumbres, el aceite de oliva como fuente de grasa. Con un consumo menor de pescados, huevos, lácteos fermentados y carne.

Tips para la dieta de hígado graso

El primer tip es incluir alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y verduras para combatir el estrés oxidativo. Asimismo, incorpora ácidos grasos omega-3 presentes en alimentos como salmón, chía y nueces, debido a sus propiedades antiinflamatorias son beneficiosas para el hígado.

Es importante reducir el consumo de alimentos procesados, que suelen contener grasas trans y azúcares. Otro tip es eliminar o reducir el consumo de alcohol, ya que puede agravar esta condición. Así como añadir el té verde a la dieta ya que puede aportar antioxidantes beneficiosos para la salud hepática.

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Si deseas incorporar alguno de estos consejos a tu dieta, te recomendamos hacerlo bajo la supervisión de un profesional. De esta manera, se evaluará de manera adecuada tu dieta para el hígado graso, ajustándose a tus necesidades y evitando que cualquier cambio resulte contraproducente.