Si eres amante de la repostería, el panqué marmoleado es uno de los favoritos para preparar en casa. Aquí te damos cinco tips para que quede perfecto.
El panqué marmoleado es un postre horneado delicioso y versátil que se puede preparar para cualquier ocasión. Es ideal para el desayuno, el brunch o la cena. Preparar panqué marmoleado en casa es muy fácil. Aquí te dejamos algunos tips que puedes tomar en cuenta si quieres sorprender a todos y perfeccionar tus habilidades en la repostería.
Por: Desiree Perea
Esta preparación dentro de la repostería es reconocido por la técnica para incluir dos colores sin que se mezclen ente sí. Sin embargo, un panqué marmoleado bien logrado va más allá de la presentación. Comenzando por el sabor, se incluyen dos sabores: vainilla y chocolate. En cuanto al dulzor, depende muchas veces de los gustos, pero no debe ser un producto empalagoso.
En cuanto a la textura, debe se ligeramente húmeda, además de mantener cierta firmeza. Las rebanadas al cortarse tiene que salir completa, sin desprender pedazos pequeños. Usualmente el panqué marmoleado no se decora o rellena con ingredientes extra. Pues debe apreciarse a simple vista un color claro y otro oscuro.
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En primer lugar, toma en cuenta que el panqué marmoleado original se prepara con pan de vainilla y chocolate en un solo bizcocho. Aunque puede parecer una tarea difícil, realmente no tiene nada de complicado. Puedes preparar una mezcla base, con harina de trigo, huevos, mantequilla y polvo para hornear. Posteriormente, se divide en dos partes, a una de ellas se le añade extracto de vainilla.
Por otro lado, puedes optar por derretir chocolate en barra para añadir a la otra mitad de la mezcla. El chocolate debe derretirse a baño María y debes dejarlo enfriar un poco antes de incorporarlo. Si quieres evitar esta primer opción, también puedes recurrir al chocolate en polvo. Sólo toma en cuenta que el tono color café será más claro.
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No es posible replicar el mismo efecto marmoleado, aquí realmente depende de la imaginación. Esa es la principal magia del panqué marmoleado, el resultado final puede ser realmente sorprendente. Eso si, el efecto que se busca es que se fusione más no que se combinen por completo ambos colores. Debe poder apreciarse la dualidad de los tonos. Es necesario colocar pequeñas porciones de manera alterna. Al final, con ayuda de un platillo, puedes dibujar pequeños círculos u ondas.
Además de la temperatura, el tiempo también es un factor que tiene efecto para lograr o no un buen panqué marmoleado. Aunque depende de la potencia de cada horno, cuando se cumpla la mitad del tiempo de horneado, con un palito de madera comprueba el nivel de cocción. El palito debe salir limpio para asegurarte de que está complemente cocido.
Como tip de emergencia, en caso de que la base se haga tostado de manera excesiva, utiliza un cuchillo con filo de sierra o bien, un rallador para raspar la parte que ligeramente quemada. Así evitarás que el sabor amargo de dicha parte, arruine le sabor por completo.
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Este puede ser uno de los pasos más complicados, no sólo para el panqué marmoleado, si no para la repostería en general. Incluso algunos considerar que es una habilidad que se perfecciona con la práctica. Aunque existen algunos trucos para ayudar a que esta actividad sea mucho más fácil. Primero debes elegir los moldes correctos, que además de tener gran residencia al calor, deben ser antiadherentes.
Además de los moldes, puedes ayudarte del papel encerado para cubrir el molde y posteriormente verter la mezcla. Recuerda cortar los extremos para que no sobresalga del molde y se queme. Por otro lado, puedes untar mantequilla en la base, así como todos los extremos para evitar que se pegue una vez horneado.
Por último, como consejo más importante tanto para el panqué marmoleado como otras preparaciones dulces se enfoca en el tema del proceso de preparación. Gracias al internet, podemos tener acceso a un sinfín de recetas. Cada una especifica cantidades que no deben cambiarse. Alterar esta parte puede tener efecto negativo en la consistencia final del panqué.