En momentos de tensión y agotamiento, el cuerpo puede beneficiarse de ciertos alimentos naturales que contribuyen a estabilizar el estado emocional y reducir el estrés. […]
En momentos de tensión y agotamiento, el cuerpo puede beneficiarse de ciertos alimentos naturales que contribuyen a estabilizar el estado emocional y reducir el estrés. Incorporar ingredientes específicos en la dieta diaria puede ayudar a mejorar la respuesta del organismo ante el estrés y brindar una sensación de calma. A continuación, cinco ingredientes recomendados para apoyar esta función.
El plátano es una fuente natural de triptófano, un aminoácido que se convierte en serotonina, conocida como la “hormona de la felicidad.” Este neurotransmisor es esencial para la regulación del estado de ánimo, ya que promueve una sensación de bienestar y relajación. El plátano también aporta vitamina B6, que ayuda en la síntesis de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina, dos elementos importantes para una mente equilibrada y en calma. Incluir plátanos en desayunos, batidos o como bocadillos es una manera sencilla de aprovechar estos beneficios.
Las almendras ofrecen una buena cantidad de magnesio, un mineral importante para la regulación del sistema nervioso y la disminución de la tensión muscular. El magnesio también está asociado con la producción de serotonina y otros neurotransmisores que ayudan a controlar el estrés y mejorar el estado de ánimo. Las almendras también contienen vitamina E y grasas saludables, las cuales colaboran en la protección celular y la recuperación del organismo en momentos de presión o agotamiento. Un puñado de almendras al día en ensaladas, yogures o como colación es una forma efectiva de integrarlas a la dieta.
Té de manzanilla para aliviar el estrés y la ansiedad
La avena contiene carbohidratos complejos que ayudan a liberar serotonina de forma gradual, permitiendo una sensación de calma prolongada. Además, aporta vitaminas del grupo B, conocidas por su rol en la regulación del sistema nervioso y en la reducción de la fatiga. Estos nutrientes favorecen la estabilidad emocional y ayudan a contrarrestar los efectos negativos del estrés. Consumir avena en el desayuno, en batidos o como base para granolas es una manera práctica de aprovechar sus efectos relajantes.
El chocolate negro, con un porcentaje de cacao de al menos 70%, contribuye a reducir el estrés gracias a su capacidad de estimular la liberación de endorfinas, que mejoran el estado de ánimo y alivian la ansiedad. El cacao en el chocolate negro también contiene flavonoides, compuestos antioxidantes que benefician al cerebro y apoyan la función cognitiva, lo cual puede ayudar en momentos de tensión. Incorporar chocolate negro en porciones moderadas como snack o en postres favorece la respuesta del organismo ante el estrés.
El té verde es una fuente rica en L-teanina, un aminoácido que ayuda a calmar la mente sin causar somnolencia. La L-teanina contribuye a la reducción del estrés al inducir un estado de relajación mental y mejorar el enfoque. Este efecto es útil para contrarrestar el estrés durante el día, permitiendo mantener una mente clara y enfocada. Una taza de té verde en la mañana o a media tarde es una opción accesible para aprovechar estos beneficios.
Incorporar alimentos naturales como el plátano, las almendras, la avena, el chocolate negro y el té verde puede ser una estrategia efectiva para reducir el estrés de manera natural. Estos alimentos naturales ofrecen nutrientes que apoyan el equilibrio emocional, la regulación del sistema nervioso y la producción de neurotransmisores que favorecen el bienestar.