Conoce los retos de la cocina en los aviones
¿Sabías que en los aviones las personas perdemos el 30% de la sensibilidad en el cuerpo? Por eso es importante potenciar los sabores de la comida
Preparar los alimentos que se consumen en los aviones no es cosa sencilla. El chef Badir Rodríguez Maawad, de la compañía LGSskychefs de México, elabora diariamente los menús de la aerolínea Air France para todas las clases. Aquí te contamos algunos retos que implica la cocina del aire.
Por Yulissa Arcos
De lunes a domingo hay al menos un vuelto que abastecer; doscientos noventa y seis platillos que preparar con diferentes menús dependiendo la clase. Un verdadero desafío para el chef Rodríguez y su equipo de cocina. Además de la elaboración de alimentos, es indispensable controlar el nivel de calidad de los ingredientes.
Badir Rodríguez asegura que la comida servida en un avión es altamente cuidada. Esto se debe a las políticas de normatividad internacional que regulan la calidad, higiene y sanidad de los productos utilizados en la cocina. Con ello, se garantiza la inocuidad alimentaria.
La cocina del aire se enfrenta, también, a las constantes críticas de los comensales quienes aseguran que los platillos no tienen sabor. Y es que, según Badir, las personas perdemos el treinta por ciento de sensibilidad en el cuerpo, cuando estamos a diez mil pies de altura. Por ello, es importante potenciar la sazón de los platillos.
No es sencillo montar los platillos. Cuando están listos los guisos son llevados al avión. Ahí el equipo auxiliar del vuelo se encargará de calentarlos y presentarlos replicando el “plato muestra” del chef. Además, resulta un tanto complicado emplatar en espacios reducidos.
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Para diseñar el menú es importante tomar en cuenta que las charolas donde se sirven los alimentos son pequeñas, ideales para el viaje. Cada día de la semana se ofrecen platillos distintos; el menú se rota de manera bimestral con la finalidad de complacer a las personas que viajan constantemente.
Las preparaciones del chef Badir Rodríguez intentan apegarse a la recetas emblemáticas de la cocina francesa. En algunas ocasiones se utilizan ingredientes mexicanos que fusionan ambas culturas. Uno de sus favoritos para cocinar es el foie gras, que generalmente se sirve como entrada.
Comida de primera clase
El menú del desayuno en primera clase consiste en un plato frío o caliente acompañado de quesos, fruta, pan y yogur. Para la comida se inicia con un bocadillo que abre el apetito, después se ofrecen dos opciones de entrada fría, sopa, y cuatro opciones de plato fuerte: pollo, res, pescado o pasta.
Al finalizar se puede elegir entre fruta, helado o pan para el postre. Entre comidas hay un buffet de sándwiches, jugos, sodas y otras bebidas. Los alimentos de esta zona son servidos en platos de porcelana, mientras que en otras clases se utilizan charolas de plástico.
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Para los viajes de trabajo
El desayuno en la clase ejecutiva generalmente es omelet que se complementa con fruta, pan y carnes frías. Después de un bocadillo, el tiempo de la comida inicia con una entrada fría con dos opciones a elegir, cuatro variedades de plato fuerte, y postre. También cuenta con buffet de sándwiches y bebidas.
Foto: Antonio Rubio
Premium economy y economy
En premium economy se inicia con una entrada fría acompañada de quesos y vinagreta. También hay dos opciones de plato caliente: estofado de res o de pollo. En ambas zonas (premium economy y economy) se ofrece fruta y un snack que consiste en una empanada caliente o un pan dulce