¿Es mejor beber cerveza de lata o de tap? Conoce las diferencias clave, ventajas y desventajas para elegir correctamente y disfrutar tu cerveza favorita.
La elección entre una cerveza de tap o en lata es una opinión que no deja de generar controversia. Aunque ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas, existen factores clave que pueden influir en la decisión de cuál es mejor. En esta nota, exploraremos a fondo las características de cada versión. Así, podrás conocer lo necesario para tomar decisiones inteligentes cuando se presente cualquiera de estas opciones.
Por: Desiree Perea
Este concepto es fácil de entender, e incluso, es cada vez más fácil de encontrar. La cerveza de tap ( o cerveza de barril), es aquella que se almacena en barriles metálicos o de acero inoxidable y que se sirve directamente desde ellos. Esto se logra a través de un sistema especializado de tuberías y grifos. De esta forma, dicho método de servicio permite mantener la frescura de la cerveza al protegerla del aire y la luz.
El proceso de servir una cerveza de tap requiere equipo y técnica. Quién se encuentre al frente de la barra, debe ajustar la presión del gas y controlar el flujo. Así, se garantiza que la cerveza salga con la carbonatación adecuada y se sirva a temperatura óptima. Además, es importante destacar las siguientes ventajas que tiene elegir la cerveza de tap:
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Al disfrutar de una cerveza de tap, la diferencia en cuanto a sabor se nota de inmediato; tiende a tener un sabor más auténtico y consistente. Esto se debe a que los barriles ofrecen un mejor aislamiento contra la luz y el oxígeno, dos enemigos de la cerveza. Aunque las latas ofrecen protección contra la luz, no son infalibles contra el oxígeno. Los barriles, por otro lado, utilizan sistemas presurizados que minimizan la entrada de oxígeno, preservando la frescura y el sabor original.
Por otro lado, este es uno de los factores más importantes que distingue a la cerveza de tap de la enlatada. Aquellas que se sirven directo del barril, suelen ser más frescas gracias al almacenamiento especializado. Esta versión se mantiene en refrigeración en todo momento, lo que ayuda considerablemente.
Todo es cuestión de gustos, por lo que no es correcto colocar a la cerveza en lata como enemigo. Es una opción realmente practica para disfrutar en casa en cualquier momento. Gracias a la evolución de la industria, las latas cuentan con un recubrimiento interno que evita el contacto directo entre el líquido y el metal.
El material también ayuda en gran medida a mantener el liquido fresco. Además, por la forma del cierre hermético, esta cerveza mantiene un buen porcentaje de burbujas. Frente a la cerveza de tap, la versión en lata se convierte en una opción preferida para reuniones en casa; pero no tiene nada hacer distinción entre una u otra.
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De esta manera, la cerveza de tap no solo destaca por su frescura y sabor superior, sino también por la experiencia que ofrece. Desde su conexión con la tradición hasta sus notas frescas, es ideal elegir dicha versión cuando se tiene disponible. Las latas tienen su lugar seguro en el mercado por su conveniencia y portabilidad, pero no compiten con la calidad y autenticidad que ofrece una buena cerveza de barril.