Pedro Martín es uno de los jóvenes talentos que han innovado el concepto gastronómico de México. Al mando de sus restaurantes Jaleo bar de tapas (en DF), Gastrobar Ñ y Azafrán (en Veracruz), nos queda claro que siempre busca reinventarse y el lema de su nuevo restaurante lo deja aún más claro: KAYE, Cocina sin reglas.
En la Colonia Condesa, el domicilio de Alfonso Reyes # 108 es otra muestra del alcance de Pedro. Con arquitectura totalmente acogedora donde los materiales reciclados encontraron su mejor usanza a mano de la arquitecta Marcela Gutiérrez Sáenz, cada detalle dota a KAYE de personalidad única que se mezcla de maravilla con la alta cocina que se encuentra en el lugar haciendo uso de ingredientes específicos de cada región que ha dotado a Pedro de experiencias en sus viajes por la República Mexicana.
Su proceso culinario puede ofrecer oro rojo, chile Huacle de Oaxaca y mariscos frescos a un precio justo y a su vez, dota a KAYE de una dinámica atractiva con tres fases: la primera se respalda en el mixólogo Khristian Torres para contar con una barra de coctelería donde podrás poder comer algo mientras esperas a que te asignen mesa. La segunda es el salón, donde las especialidades comprenden frutos de mar y carnes de cordero, pato o rib eye a las brasas o la parrilla, según la preferencia.
A su vez, la cava de vinos es toda una cueva de tesoros. En ella se encuentran caldos franceses, italianos, españoles y mexicanos que se maridan con distintos tipos de vinos para la ocasión. Por último, se encuentra un privado para 8 personas, el espacio más exclusivo del lugar. Y sin dejar de lado la tendencia Pet Friendly, en la planeación de KAYE también se pensó en Fish & Chips y demás recetas caseras que encantarán a la nuestros compañeros del hogar, que se verán consentidos con ensaladas y postres con los que Kaye cuenta. Kaye, Cocina sin Reglas recibe a sus comensales de lunes a domingo entre 13 y 24 horas. Asistir nos invita a comer a nuestro antojo, todo lo que se nos antoje, sin restricción alguna y llenos de placeres.
Por Ingrid Cubas
@ingrid_cb