5 tips para hacer agua de avena fácil en casa

1. Utiliza avena entera

En primer lugar, es posible encontrar avena molida o en grano entero y para la receta de agua de avena, lo mejor es utilizar la presentación entera. Si bien requiere un proceso de hidratación, es la mejor manera de aprovechar el grano. Puedes añadir un poco de leche para lograr una textura ligeramente cremosa. Además, otro consejo es que no debes dejar mucho tiempo después de prepararla para consumirla, ya que toma una consistencia viscosa que puede convertirla en una textura no muy agradable.

2. Hidrata toda la noche

Este es el proceso correcto para lograr una textura suave para prepara agua de avena. Sin duda requiere de paciencia pero la ventaja es que es un proceso que ocurre de manera autónoma. Una noche antes, prepara un recipiente de vidrio con la porción de avena deseada y cubre con la cantidad de agua adecuada. Con ayuda de una cuchara, asegúrate de que todos los copos de avena tengan agua, si bien por su peso al momento estarán flotando, deja reposar toda la noche, en un lugar fresco y podrás observar al día siguiente que hasta su tamaño aumenta. Esa es la señal de que está lista y puedes llevarla a la licuadora.

3. Hierve para suavizar la avena

Si quieres preparar el agua de avena de manera rápida por las mañanas, puedes recurrir a la estufa para acelerar de alguna manera la hidratación de los granos de avena. Las porciones correctas son dos tazas de agua por cada taza de avena. Debes añadir la avena hasta que el agua esté hirviendo y a partir de ahí, necesitará una cocción de 10 minutos. Una vez que esté listo, deja enfriar por completo para poder pasar a la licuadora y moler la preparación. Puedes servirla en un vaso con hielos.

4. Prepara para toda la semana

Por otro lado, los granos de avena son secos por lo que requieren hidratarse para poder tener lista el agua de avena. Para ahorrarte y tener que repetir este paso varias veces, la mejor solución es preparar una gran cantidad al inicio de la semana. Considera tener disponibles jarras de vidrio con tapa de cierre hermético para poder guardarlas y extender su periodo de vida. Si encuentras recetas para medio litro o un litro, sólo necesitas multiplicar por dos o tres las porciones para preparar mayor cantidad.

5. Reutiliza los granos de avena

Finalmente, si estás en busca de una consistencia limpia en el agua de avena, utiliza un colador para eliminar por completo los restos sólidos. Pero no tiene por qué tirarlos a la basura, la avena molida puedes añadirla a alguna receta de hotcakes o hasta funciona para preparar galletas. Incluso puedes añadir pequeñas porciones a un smoothie o licuado, aprovecha que está suave y puede esconderse con los otros ingredientes.