Prada lanzó una colección de bolsas realizadas en colaboración con las renombradas arquitectas Kazuyo Sejima, Elizabeth Diller y Cini Boeri. Bolsas y prendas al mismo […]
Prada lanzó una colección de bolsas realizadas en colaboración con las renombradas arquitectas Kazuyo Sejima, Elizabeth Diller y Cini Boeri. Bolsas y prendas al mismo tiempo, cada diseño cumple con una doble función. El diálogo entre disciplinas creativas —la moda, el diseño industrial y la arquitectura— forma parte del proyecto Prada Invites, ahora enfocado en la experimentación con el icónico nailon negro de la casa italiana.
Diller, socia del estudio de diseño interdisciplinario Diller Scofidio + Renfro, estuvo a cargo de dos productos: The Envelope y The Yoke.Una pieza de equipaje que, a su vez, tiene otra vida como una prenda impermeable. A manera de maleta, The Envelope protege perfectamente el interior de las condiciones climáticas externas; como impermeable, destaca por sus cierres industriales y cintas ajustables que facilitan la metamorfosis. Cuenta con bolsillos invisibles que resguardan una capucha, además de tener el espacio para objetos esenciales de un viaje ligero.
Sobre los hombros, The Yoke es una reinterpretación actual de prendas como el arnés utilizado para trabajar con caballos. En cambio para Diller, esta pieza protege a los hombros del peso del día a día. De estética utilitaria, está diseñado para albergar objetos cotidianos como un lipstick, un bocadillo, cuadernos y tanto más. La flexibilidad del nailon le permite transformarse en una pieza alternativa, un bolso de mano que cuenta con una cinta ajustable para adherirse a la muñeca.
La pieza creada por Kazuyo Sejima coincide en caer sobre los hombros, una nueva estética en términos de diseño de bolsos. Diseñado en forma de “U”, cuenta con pequeños y coloridos bolsillos externos en rosa y azul, adheribles según la preferencia del usuario. Si se desea cargarla en mano, se transforma en una bolsa de asas en los mismos tonos mencionados anteriormente.
La contribución de la reconocida italiana Cini Boeri es el punto tradicional en medio de la colección. Funge como una revitalización del bolso mensajero a partir del lustroso nailon de Prada. La pieza nos recuerda que también el recuerdo de los clásicos a partir de la exploración de nuevos materiales y el perfeccionamiento de su calidad, es imprescindible para ensayar el futuro.
Se trata de una rama de la firma italiana que inició en 2018 con la colaboración de los arquitectos Rem Koolhaas, Jacques Herzog y Pierre de Mearon, así como el diseñador Konstantin Grcic y Ronan y Eran Bouroullec. Los nombres mencionados hicieron contribuciones creativas para la colección masculina otoño/invierno 2018.
Liz Diller es socia del prestigioso estudio Diller Scofidio + Renfro. En 2018 fue la única arquitecta que formó parte de la lista Time 100. A inicios de 2019 ganó el premio Jane Drew Prize dedicado a la labor del género femenino en la arquitectura.
Por su parte, Kazuyo Sejima fundó en 1995 el renombrado despacho SANAA de arquitectura, al lado de su socio Ryue Nishizawa. En 2010 fue galardonada con la nominación del Premio Pritzker. Su despacho tiene la autoría de proyectos tales como el futurista Rolex Learning Center, en Lausana, Suiza; o el minimalista edificio del New Museum en Nueva York.
Cini Boeri es una reconocida arquitecta y diseñadora italiana. Fue una de las primeras mujeres que trabajó ambas disciplinas durante los años 50, convirtiéndose para siempre en un referente del diseño industrial italiano. A sus ahora 94 años, Boeri es conocida por haber estado a cargo del interiores de un apartamento en la Torre Trump; la realización de showrooms de la marca Knoll y el diseño para objetos de iluminación de la compañía Artemide.