¿Tinto, blanco, rosado, o tal vez un poco de cada uno? Es una idea que años atrás era imposible. Pero ahora existe un aparato para servir vino sin abrir la botella o sacar el corcho. Se llama Coravin y tiene un sistema de dispensador mecánico que facilita servir una copa sin modificar el sabor ni olor del vino.
Cómo funciona el dispensador
La mecánica del aparato para servir vino sin sacar el corcho Coravin es muy sencilla y similar a la de un sacacorchos. El aparato introduce una aguja muy fina de acero a través del corcho e inyecta gas argón que no modifica ni el sabor ni el olor del vino. La idea es presurizar la botella para que empuje el vino hacia fuera y salga con pulsar un botón. Al final, sólo se retira la aguja del corcho y la botella quedará sellada como nueva.
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El gadget para los fans de vinos ha causado sensación, ya que después de usarlo se le puede dar vuelta a la botella y no caerse ninguna gota de vino. Gracias al sujetador que rodea el cuello de la botella, se puede servir vino sin necesidad de retirar el corcho o los sellos de seguridad.
Beneficios del aparato para servir vino
Sin duda, un gadget que no puede faltar en las mesas de los amantes del vino. Pero también en bares y restaurantes por sus beneficios a largo plazo. Para empezar porque permite ahorrar ya que cada vez que se pide una copa de vino se debe abrir una botella nueva y esto encarece su valor. Pero con estos aparatos se puede servir el vino sin descorchar la botella, lo que permite su conservación.
Otro beneficio es para aquellos que gustan de tomar una copa de vino en casa (solos o acompañados), ya que si no se termina la botella, fácilmente se conservara más tiempo, sin la imperiosa necesidad de “bajar” la misma botella en una o dos comidas seguidas. Tampoco se debe esperar un día especial para abrir una buena botella porque se puede servir cuando se quiera probar un buen vino.
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Historia del sistema Coravin
El sistema Coravin se inventó en el año 2013 tras diez años de investigación por Greg Lambrecht. Este ingeniero del MIT (Massachusetts Institute of Technology) usó su conocimiento sobre agujas médicas y su uso tecnológico en favor de su pasión por el mundo del vino.
“Greg pasó años probando y mejorando su diseño original hasta que el Sistema Coravin se convirtió en lo que es hoy”, explica la página web de Coravin.
Un Coravin se compone de una mecánica sencilla: aguja, gas argón, y un pulsador. Sin embargo, la diferencia entre los modelos se encuentra en el material con el que están hechos. Lo que se debe tener en cuenta es los repuestos de agujas y de gas argón, ya que se debe cambiar cada seis botellas.
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Para conocer más detalles del aparato para servir vino sin abrir la botella entra la página oficial de Coravin.
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