Recibe a todos en casa con un brunch navideño irresistible. Este formato te permite combar lo mejor del desayuno y el almuerzo, así que no podría ser mejor.
Ha llegado el momento del año en que el calendario se llena de reuniones. La opción más popular sin duda es la cena, sin embargo, en los últimos años el brunch navideño también figura como una idea favorita. Este formato presume múltiples ventajas, por lo que vale la pena considerarlo en esta época. Si tienes pensado en armar una reunión en casa, te compartimos algunas ideas para armar el menú ideal.
Por: Desiree Perea
Si el brunch navideño tendrá lugar al aire libre, es importante considerar platillos que ayuden a mantener el cuerpo caliente. Puedes servir sopas o cremas en bowls o tazas para hacer la manipulación más fácil. Por otro lado, las tablas de quesos y charcutería son una gran opción; son versátiles y puedes añadir o eliminar embutidos de acuerdo a tus gustos y los de los invitados.
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El huevo sin duda es una estrella en este formato, sin embargo, para un brunch navideño no deja de ser mala idea. Desde el clásico avocado toast o los huevos benedictinos; también son la forma perfecta de añadir proteína a los chilaquiles.
Los sándwiches son una opción que no falla, lo mejor es considerar 3 o 4 rellenos diferentes para que los invitados tengas de donde elegir. Si quieres darles un giro de temporada, puedes sustituir el jamón por pechuga de pavo asada, pierna o lomo de cerdo. Para hidratar, una salsa de arándanos con chipotle es perfecta.
Claro que las opciones dulces no pueden hacerse a un lado, el brunch no estaría completo. Ya sea que decidas ofrecer pancakes, waffles o pan francés, considera acompañarlos con fruta fresca de temporada. Además, los untables no están de más: cajeta, leche condensada, ganache de chocolate o mermelada.
Para cerrar el brunch navideño, la oferta de postres no puede pasar desapercibida. Aquí, es posible encontrar un sinfín de opciones; desde una ligera y refrescante gelatina, hasta un pastel o tarta para compartir al centro. Sin duda vale la pena aprovechar las frutas de temporada, puedes elaborar cremas, compotas o mermeladas para utilizar como relleno:
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La bebida por excelencia para el brunch tradicional es la mimosa, y para esta temporada, puedes hacer ligeros cambios para servir una versión diferente. La primera opción es sustituir el jugo de naranja por mandarina o lima. El ponche de frutas también funciona como líquido base para preparar cócteles caseros. Asegúrate de colarlo para servir un trago limpio. En caso que haga calor, puedes preparar chocolate o café frío.
Un brunch navideño puede convertirse en un alternativa atractiva para no dejar pasar la reunión anual con amigos o familia. La ventaja de este formato es la amplitud del menú; no se limita a opciones saladas, también hay espacio para postres, pan dulce y por supuesto, cocteles relajados. Recuerda que una planificación inteligente y a tiempo puede ayudarte en distintos ámbitos; desde ahorrar en las compras, hasta considerar los gustos de los invitados para que nadie se quede sin comer.
