Cómo hacer un brunch con el recalentado de la cena de Navidad

Las cenas de Navidad suelen rebosar la mesa de platillos deliciosos. Todo de planea para que todos disfruten a su gusto y no se queden con el estómago vacío. Sin embargo, después de la gran cena, es común encontrarse con una buena cantidad de comida sobrante. Conocido comúnmente como recalentado, esta oferta suele disfrutarse en la mañana de Navidad. No hay problema con servirlo igual, pero la realidad es que hay muchas posibilidades para darle una vista diferente. En este nota, te compartimos algunas ideas para transformar el menú de Navidad y así, aprovechar los platillos al máximo.

Por: Desiree Perea

Consideraciones para guardar el recalentado

Lo primero que debes tomar en cuenta para el recalentado tiene que ver con el almacenamiento de la comida restante. Para garantizar la seguridad alimentaria y mantener el sabor de los alimentos, estos son algunos consejos fundamentales:

• Enfriar rápidamente: Una vez que la comida se haya enfriado a temperatura ambiente, guárdala y refrigera lo antes posible.
• Dividir en porciones: Divide los alimentos en porciones para facilitar la tarea de volver a calentar.
• Etiquetar: Indica el nombre del platillo y la fecha en cada recipiente.
• Consumir pronto: Se recomienda consumir el recalentado en los próximos 3-4 días.
• Congelación: Si no piensas consumirlo en próximos días, lo mejor es congelar las porciones.

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Un menú completamente diferente sin decirle adiós a los alimentos

Después de una cena exquisita, el día siguiente no tiene por qué pasar desapercibido en cuanto al menú por servir. El recalentado muchas veces es como la continuación de la cena, pero la ventaja aquí es que los alimentos ya están listos. Más allá de solo calentar, también puedes optar por darle una vista diferente al menú. Por ejemplo, si sobró pavo, pierna o lomo, estas opciones pueden funcionar en un sinfín de platillos para un desayuno tardío: 

• Omelettes o huevos al gusto
• Sandwiches
• Bagels
• Crepas saladas

También puedes aprovechar el relleno para darle un sabor diferente a las preparaciones antes mencionadas. Por otro lado, lar guarniciones también suelen ser parte importante del recalentado y a partir de ellas, las posibilidades son realmente amplias:

• Ensalada fresca con pasta.
• Croquetas o tortitas fritas con puré de papa.
• Mini tartas con vegetales salteados y queso.

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Para la categoría de dulce, puedes transformar los postres como la ensalada de manzana, en un bowl con avena o granola. Lo ideal es también preparar en cantidad abundante; sin embargo, esto no quiere decir que hay que preparar aún más platillos. Al contar con una oferta amplia en el brunch, las personas pueden elegir y armar el plato a su gusto.

Bebidas para acompañar el recalentado

Finalmente, pero no menos importante, está el tema de las bebidas. Aquí tampoco tienes que pensar en algo demasiado complicado. La bebidas calientes predilectas siguen siendo el café, té o chocolate caliente (si es que hay platillos dulces). También puedes optar por las populares mimosas, mejor si en la cena sobró champagne y lo que menos queremos es que se desperdicie. Si perdió burbujas, puedes ayudarte de un poco de agua mineral.  

Así, el recalentado de Navidad no tiene por qué ser aburrido. Con un poco de creatividad, puedes transformar las sobras de tu cena en un delicioso brunch que sorprenderá a tus invitados. La ventajas de aprovechar los alimentos son múltiples. Además, gracias a la variedad del menú, también es posible fusionar o crear nuevas preparaciones a partir de un solo plato.