Escrito por Jorge Boneta. Chef Corporativo Porfirio’s Restaurante
Cada que me preguntan ¿por qué gastronomía?, ¿por qué querías ser chef?, la verdad no se qué responder, solo sé que yo no escogí la profesión, ella me escogió a mi. Ser chef en estos días, es tema de moda. Todo joven quiere ser parte de este mundo gastronómico sin saber realmente como es. Recuerdo que al salir de la prepa, las carreras de “moda” eran LAE, Merca y Comunicaciones, y todas las universidades tenían algo que ofrecer, una se especializaba en esto, la otra en aquello, y los grupos de amigos se reunían para ponerse de acuerdo y poder estar juntos, en las mismas clases, sin pensar realmente si es lo que ellos querían, si de verdad era su vocación. Ellos solo querían pasársela bien, chido, está de moda no?, es lo de hoy, no?. Cuántos de esos ex universitarios acabaron su carrera, y peor aún, no la ejercen?. El problema no es arrepentirse, es terminar, echar a la basura esos años para no hacer lo que supuestamente estabas listo y preparado para hacerlo.
Actualmente pasa lo mismo con la gastronomía, toda la “chaviza” quiere ser el chef del momento, ¡el Rock Star! es cierto, actualmente los chefs somos los rockstars, de los restaurantes, de los hoteles, el auge del “Chef” es cada vez más grande. Y es por que como cualquier profesión, tiene su momento, ¡su Boom!. Ahora, no solo es necesario que te guste, es muy importante ser bueno, o al menos tener la habilidad de ponerle sal y pimienta a la comida en cantidades exactas. Mucho amor, y paciencia. Si se tienen estos atributos, lo que diga la gente no importará, y solo se seguirán los sueños. La etapa universitaria puede llegar a ser divertida, eso que ni que, lo interesante es cuando uno sale al mundo laboral hotelero-restaurantero. ¿Quién quiere pasar su carrera a gritos, quemadas y después repetirlo día a día por toda tu vida?, ¿Saben quien? Yo si. ¿Por qué?
Solo que para mi, las quemadas, las cortadas, los gritos, el rush, los platos, los clientes, el servicio, las Gracias, el “está riquísimo”, el “no me gustó”, el “wakala”, el “está increíble”, el lavar, el reír, el llorar, el conocer, el viajar, el aprender, son cosas que me gustan. Y que no todos tenemos la dicha de poder decir “SOY CHEF” y me lo he ganado.
Los jóvenes de hoy quieren ser como Enrique Olvera, Benito Molina, Pedro Evia, Oscar Herrera, Mónica Patiño, Martha Ortiz, Ricardo Muñoz entre otros, “son los mejores de México” “tienen fama y dinero” si claro. Todos los puntos son buenos, en efecto, son los mejores chefs de México, son exitosos y bueno, tienen lo suyo, pero SE LO HAN GANADO, no por estudiar Gastronomía o un diplomado serán como ellos, tienen que trabajar y trabajar mucho para lograrlo. Adquirir experiencia, entrarle a los “guamazos” estar en una “camotiza de cocina” aprender, leer, culturizarte, demostrar tu pasión. Cocinar puede llegar a ser tu vida, siempre y cuando tengas lo necesario.
Ahora les pregunto a todos los jóvenes Gastrónomos, ¿están listos para aprender, estar abiertos a escuchar, a seguir reglas, a tener disciplina, a ser humildes, a ser entregados, a dar su vida por esta vida que no es nada fácil, que es desgastante, en la que se sacrifica mucho, en la que no hay cumpleaños, ni navidades, ni años nuevos, que solo tendrás amigos del rubro? ¿Están dispuestos a eso? Si es así solo les puedo decir que obtendrán muchas satisfacciones, tendrán a los mejores amigos, locos como ustedes, se llenarán de pasión, compartirán, conocerán lugares increíbles, aprenderán muchas culturas, viajarán, comerán de lo lindo, beberán lo mejor, llorarán de la emoción al escuchar su primer “¿me encantó, tú eres el chef?” Formarán parte de algún equipo de trabajo grande, serán reconocidos como Guerreros. Y lo mejor de todo es poder voltear y ver tu progreso, poder decir, “yo fui lava loza y ahora tengo mi propio restaurante” “empecé como ayudante y ahora soy Chef Ejecutivo Porfirio’s”. Yo hoy en día, con mas de 15 años de trayectoria, puedo decir, que sigo aprendiendo día a día, que me levanto todos los días con la emoción de cosas nuevas aprenderé, y aun así tengo mis fallas, no todo es perfecto, pero esa es la sal y pimienta de la vida, es lo que tenemos que valorar. Yo aquí estaré, ¿tienen dudas?
Para eso estoy. Recuerden no se cocina, se practica un arte. Ahora, ¿están realmente listos para ser Chef?
