Durante los años 50 en la ciudad de Nueva York, se dio un boom de los denominados casos de “viajeros en el tiempo”. Un caso en específico fue el que ocurrió durante el verano de ese año en la ciudad, cuando los habitantes de dicha metrópoli caminaban asombrados por la apariencia de un hombre que vestía impecable, con ropa del siglo XIX.
El hombre, a quien después se reconoció como Rudolf Fenz, lucía desconcertado ante “la ciudad que nunca duerme”, hecho que lo hacía lucir aún más extraño pues el caballero parecía no tener idea de lo que pasaba o dónde se encontraba, sin percatarse de la dirección a la que se dirigía.
Uno de los automóviles que circulaba por las calles del Time Square lo atropelló. Los testigos afirman haber encontrado en sus bolsillos monedas y billetes fuera de circulación con fecha del año 1876 junto con una carta enviada desde Filadelfia, fechada en junio del mismo año de las monedas.
Tras una serie de investigaciones, el Departamento de Personas Desaparecidas de la ciudad de Nueva York, concluyó que el hombre recientemente fallecido, correspondía en aspecto físico, forma de vestir, edad y nombre a la descripción de un sujeto de 29 años que había sido desaparecido en 1876 sin dejar ningún tipo de rastro.
En honor a su historia, Hendrick’s Gin creó el siguiente coctel:
VIAJERO EN EL TIEMPO
INGREDIENTES
- 20 ml de Hendrick’s Gin
- 20 ml de Cointreau
- 20 ml de Lillet
- 20 ml de zumo de limón y un toque de absenta
PREPARACIÓN:
Mezclar todos los ingredientes en una coctelera y agitar vigorosamente sobre cubitos de hielo. Colar dos veces sobre un vaso de coctel.
¡Disfrútalo!
