Cinco lugares para pasar un fin de semana en Pachuca y sus alrededores, desde un taller de cerámica hasta un rancho de vacas felices.
Toma tu auto o arriba a la central camionera del norte. A menos de dos horas de la Ciudad de México se encuentra Pachuca, una pequeña ciudad con un pasado minero donde se puede pasar un fin de semana tranquilo en compañía de manjares y bebidas dignas de hacer el viaje, porque esta ciudad se ha transformado y hoy es mucho más que pastes. Además, las experiencias gastronómicas son mucho más asequibles que en la Ciudad de México.
Por: Jazmín Martínez
Un pequeño restaurante que comenzó en el piso superior de una casa y hace poco tuvo que mudarse a un espacio más amplio. El responsable de cocina y dueño del lugar, el chef Luis, elabora una cocina amable, confortable que además echa mano de la disponibilidad de productos locales cultivados orgánicamente. “La Gusgue” se ha vuelto un espacio consentido por locales y ya comienza a atraer turistas.
Rafael Vega Sánchez 110, Periodistas, Pachuca de Soto
El terruño del chef Aquiles Chávez que rinde homenaje a su abuelo. En Sotero se encuentra una cocina familiar pero refinada dentro de una casa pachuqueña donde uno se siente agusto y atendido. La familia dirige el lugar desde su trinchera y hasta el más pequeño de los Chávez le entra al quite y te atiende en el salón. Sotero es un o de los lugares que ha logrado que quienes hacen turismo gastronómico estén volteando hacia Pachuca.
Dr. Manuel del Corral 101, Real de Minas, Pachuca de Soto
Parcela: un pedacito de campo en la Roma
Próxima a cumplir cien años, esta fábrica está íntimamente ligada a la historia gastronómica de México. Con sus productos de cerámica de calidad excepcional las vajillas y enseres de Ánfora le han dado la vuelta al mundo. La legendaria vajilla que se coloca sobre las mesas de Sanborn’s es Ánfora; seguramente nuestras abuelas tendrán en sus alacenas algún ejemplar de hace varias décadas y la marca es tan famosa que ha aparecido en la portada de la revista Time. En Pachuca se encuentra la planta de producción que, si bien no tiene acceso al público en general, dos veces al año organiza una venta de saldos donde los asistentes enloquecen por lo barato de las piezas que se ofrecen.
Recomendación si vas a ir a la venta de saldos: fórmate desde las siete de la mañana y lleva un equipo de gente para poder escoger los productos. La próxima venta será del 29 de agosto al 1 de septiembre.
Camino a Pozos Tellez Km. 1.5 s/n, Mineral de la Reforma
Rumbo a Actopan se encuentra un rancho donde la crianza de vacas está destinada exclusivamente a la producción láctea. Aquí las vacas crecen con espacio suficiente para integrarse en grupos, pastar, y llevar una vida digna y apacible.
Dentro del rancho se produce yogur griego, quesos de variedades como port salut, manchego y quesillo, además de leche bronca y por supuesto, nata. A este producto hay que dedicarle su espacio propio; la nata se hace gracias a un proceso que involucra reducir la leche a fuego lento y agregarle crema para espesarla. Esto tarda cuatro días y el resultado es un producto untuoso que puede elevar la categoría de cualquier pan salado.
Maguey 9, La Palma, Pachuca de Soto
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En las afueras de Pachuca, en el municipio de Huasca, se encuentra este proyecto de cultivos orgánicos que se ha dado a la tarea de producir especies vegetales poco conocidas. Aquí se cosechan ejotes amarillos, acelgas de colores y berenjenas exóticas conocidas como lisadas, que tienen una piel marmoleada entre blanco y morado.
Nuevos Horizontes participa con el círculo de productores de Huasca. Gracias a esto campesinos de la región que también producen cultivos orgánicos pueden venderlos a precios justos.