Se basa en los elementos que conforman la dieta mediterránea: aceite de oliva, aceitunas —entre las que destaca las kalamata—, quesos y vinos; vegetales frescos […]
Se basa en los elementos que conforman la dieta mediterránea: aceite de oliva, aceitunas —entre las que destaca las kalamata—, quesos y vinos; vegetales frescos como jitomate, berenjena y pepino; pescados, cordero, aves y puerco; granos como el trigo y el arroz.
La comida griega comenzó con los minoicos alrededor del 2700 a. C., quienes mezclaron los productos de los animales domésticos con las almendras, las uvas y las aceitunas de la zona. Al desaparecer, llegaron los antiguos griegos adoradores de Aristeo, el guardián de la abejas y el dios protector del ganado, la caza y los arboles frutales. Ellos salaban ciertos alimentos para conservarlos.
En ese mismo periodo surgieron las bases de la panadería y la vinicultura. Se introdujeron las especies marinas y se condimentaron las preparaciones con canela, pimienta y orégano. A la par, fueron implementados nuevos utensilios como hornos de cerámica. Los nuevos conocimientos se incluyeron como parte de las artes impartidas a los jóvenes y se comenzaron a realizar documentos sobre lo sucedido alrededor de la mesa. A través de las batallas, las conquistas y los movimientos humanos hubo un mestizaje complejo que introdujo ingredientes y técnicas provenientes de los árabes, los asiáticos e incluso del Nuevo Mundo. De igual manera, se expandieron los conocimientos para nutrir las cocinas italiana, francesa y española, dentro de la gastronomía griega.
Rituales
En la mesa helena se respira camaradería y familiaridad, por lo que sus modales son un poco más relajados e íntimos. En vez de esperar al anfitrión para comenzar a comer, se acostumbra que sea éste el que atienda a los invitados. Se comparten alimentos en porciones al centro y de mano en mano. Se utiliza la sal como reclamo ante una preparación simplona y el pan pita se convierte en un utensilio versátil que puede ser cuchara, servilleta y ayuda para limpiar el plato. En general, el peor modal es el que busca la individualidad y aleja al comensal del alimento.
El top de ingredientes o platillos
Se basa en los elementos que conforman la dieta mediterránea: aceite de oliva, aceitunas —entre las que destaca las kalamata—, quesos y vinos; vegetales frescos como jitomate, berenjena y pepino; pescados, cordero, aves y puerco; granos como el trigo y el arroz.
Sus platillos más conocidos son el tatziki (pepino con yogurt), la fasolada (sopa de frijol con tomates, zanahoria y apio), el gyros (revueltos de pita con carne y vegetales), la moussaka (similar a la lasaña, hecha de carne y berenjena), la baklava (postre de pasta filo con nueces y miel). Además de las clásicas ensalada griega, macedonia de frutas y maze o aperitivo de queso feta y aceitunas.
Tips para disfrutar más de la comida griega
Cuando visites un restaurante griego no olvides pedir un ouzo —licor anisado— al terminar el festín. Si viajas a Guadalajara, no dejes pasar la oportunidad de disfrutar de una taberna griega en Agios Aggelos.
Los lugares
En algunos restaurantes como Agapi Mu, en la Condesa, organizan noches de fiesta griega, donde además de la comida se puede disfrutar de las danzas populares.