Amomoxtli, el refugio místico que se centra a los pies del Cerro del Tepozteco, un lugar que conserva una esencia espiritual llena de tradición. A media hora de Cuernavaca se encuentra Tepoztlán, pueblo mágico que es conocido por su rusticidad, herencia cultural y arraigo en la práctica de métodos ancestrales.
Por: Isis Malherbe
Al entrar al pueblo de Tepoztlan, las calles empedradas dan la bienvenida con enormes montañas, casas hechas de piedra y tiendas con artesanías típicas de la región. Tepoztlán es visitado por viajeros, hippies, coaches y buscadores espirituales que aman el misticismo, intentando cargarse de energía y disfrutar de la naturaleza cerca de la ciudad. Además, los locales platican un secreto a voces, que el cerro del Tepozteco alberga una base extraterrestre que conecta con el cerro Tlacatépetl.
Para llegar a Amomoxtli pasamos por muchas calles pequeñas, donde la mayoría de las casas son de piedra, techos de teja, árboles de frutos y flores de colores vibrantes. El hotel está construido a las faldas del cerro del Tepozteco, al abrirse las puertas, pasas por un pavimento empedrado de curvas con paisaje boscoso y cruzas un puente que fue edificado hace más de 200 años. Más adelante el personal te espera para darte la bienvenida y asignarte la habitación.
Definitivamente Amomoxtli es un santuario de serenidad, en un ambiente holístico, donde se puede disfrutar de sus hermosos jardines, temazcal, spa, alberca y restaurante entre otras amenidades. Es la opción perfecta para ir en pareja y hacer una pausa para reconectar con el cuerpo y el espíritu. El spa tiene una gran variedad de ceremonias, terapias, lim1pias, baños que están enfocados a experiencias de bienestar, integrando prácticas antiguas con las modernas y aplicando ingredientes locales.
Amomoxtli se encuentra en el pueblo magico de Tepoztlan.
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Reconectando la mente por medio de talleres
Sus talleres y actividades enfocadas al bienestar tales como: meditación, yoga tantra, degustación de pulque, mixología con tónicos sagrados y descubriendo los poderes de los cuarzos. Los cuales te harán disfrutar de cada momento. El recinto es reconocido por ser una entrada a nuestros antepasados, que provee técnicas naturales que son patrimonio histórico de Morelos. La casa principal es el corazón del refugio de lujo, cuenta con una antesala en la que podrás ver alguna película o disfrutar de una buena lectura acompañada de un café y pan hecho por el personal del restaurante Mesa de Origen.
Desde su antecomedor y bar se puede admirar la belleza de sus jardines con abundantes árboles con frutos y una fuente pequeña de agua cristalina, al seguir el camino se encuentra la entrada al temazcal, el mismo que tiene un enorme estanque natural con miles de peces goldfishes de colores y vegetación alrededor. El spa está rodeado por dos ríos y la palabra Amomoxtli significa lugar entre dos ríos, de ahí es donde surge su nombre.
El interiorismo estuvo a cargo de Nicolás Domínguez, la decoración en las habitaciones hace homenaje al trabajo hecho por artesanos mexicanos de distintas regiones, muebles de equipal decorados, bordados tradicionales y sábanas de algodón de 350 hilos son parte del mobiliario. Cuentan con comodidades diseñadas para que los huéspedes disfruten de la tranquilidad absoluta. Todos los cuartos tienen un jardín privado que cuenta con un sofá y una fogata que ocupa combustibles orgánicos.
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Ecoeficiencia
Amomoxtli cuenta con paneles solares que permiten tener energías limpias. Con los desechos orgánicos del jardín se realiza composta y se lleva a cabo un plan de separación de basura. También tiene sistemas de captación y tratamiento de aguas para aprovechar y evitar desperdiciarla.
Ha obtenido la acreditación en el Distintivo S, en dos ocasiones consecutivas. Este distintivo avala la sustentabilidad en las operaciones del hotel en acciones como la cantidad y tratamiento de desechos que se generan. Asimismo, los productos de higiene personal son orgánicos, biodegradables y de productores locales. Por último, las aguas residuales son tratadas para utilizarse en el riego de los jardines.
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Mesa de Origen, aunado a la sustentabilidad
El restaurante y el hotel se distinguen por su compromiso con la sostenibilidad, un enfoque que ha sido parte integral de su identidad desde el primer día que abrieron sus puertas. Siempre está en búsqueda de nuevas estrategias para apoyar al medio ambiente. El 80% de los ingredientes que se utilizan en el restaurante se compran a proveedores locales, para reanudar la economía del estado.
Todo lo que se prepara es natural, al momento y con sazón hogareño. No utilizan productos enlatados o procesados, siempre apuestan por propuestas naturales con historia. Su menú cuenta con una amplia oferta de platillos, los cuales están inspirados y hechos con métodos de cocina tradicional como el horno de leña y el tlecuil. La vajilla azul de barro es originaria de la hacienda, en la cual se sirve comida mexicana e internacional como: pasta, pizzas, carne o ensalada.
¿Dónde?: Netzahualcóyotl 115, Valle de Atongo, 62520 Tepoztlán, Morelos.
IG @amomoxtli
¿Qué comer?
Te recomendamos pedir en el restaurante Mesa de Origen, los tacos de Jamaica, la cecina o las sopas, de postre el tamal de chocolate o el helado de elote, mazapán y frutos rojos. Por la mañana no debes dejar de comer pan recién hecho, chilaquiles rojos de la casa y quesadillas de flor de calabaza y huitlacoche.
Recomendación:
Es un lugar para ir en pareja o solo, no lleven niños, ya que es para descansar y no cuenta con televisión en los cuartos.
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