IBEROSTAR GRAND HOTEL PARAÍSO: SOÑAR COMER Y GOZAR…
Buscar el sol y encontrar el placer para todos los sentidos. La Riviera Maya es esa promesa cumplida. El Grand Paraíso nos invita a vivir una aventura que sobrepasa el goce de la relajación y se convierte en una experiencia gastronómica y sensorial.
@rev_elgourmet
Llegar al mar en cualquier parte del mundo produce un sinfín de emociones. Bajar del avión y sentir el golpe de calor en la cara, pone sobre aviso al cuerpo de que algo está por venir. Desde Cancún hay que recorrer 20 kilómetros para llegar a Iberostar Playa Paraíso en Riviera Maya, donde cinco hoteles se abren, dispuestos a brindar experiencias nuevas.
El más nuevo de estos recintos es el Grand Hotel Paraíso. Todo el complejo es como el sueño supremo de quien busca el descanso, pero el lujo mayor está entre las paredes del Grand Hotel, un todo incluido de lujo para adultos que busca que los huéspedes, además del confort, la playa y el sol, vivan su estancia como una aventura gastronómica.
El diseño de este hotel fusiona un estilo barroco con toques griegos, pintados al fresco en los techos de algunos de sus corredores. Las sombrillas y camastros salpican las zonas de las tres albercas: una de agua salada, otra pensada para la plena tranquilidad, y la última cubierta, junto al spa y al gimnasio.
Vivir para comer
Para cumplir la promesa de una experiencia culinaria completa, el resort cuenta con un restaurante principal, cuatro a la carta y uno en la playa. El Bellavista y el comedor de la playa La Brisa ofrecen el servicio de bufet; los demás restaurantes son temáticos y preparan especialidades de distintas tradiciones gastronómicas: Toni’s Surf & Turf sirve cocina mar y tierra; Venecia es italiano; Haiku, japonés, y L’atelier es el paraíso gourmet donde la creatividad y los ingredientes ponen un punto y aparte. Hace falta estómago para disfrutarlos todos, pero vale la pena intentarlo sin remordimientos. Finalmente, aquí se viene a buscar el placer; hedonismo puro.
El cocinero español Daniel Rodríguez es uno de los responsables de las hazañas culinarias, quien se formó en la Escuela de Cocina de San Sebastián. Otro de los culpables gastronómicos del lugar es Rafael López (también español), con estudios en la Escuela Superior de Hostelería Hurtado de Mendoza de Granada. Ambos han recorrido los diferentes hoteles de esta cadena alrededor del mundo, y ahora son parte de la promesa gastronómica del Grand Hotel Paraíso.
Los 360 grados que abarca el buen vivir pasan por el mundo del vino, y para eso, el Grand cuenta con el master wine Yamir Pellegrino, que encabeza a un grupo de sommeliers; quienes en cada comida y cena recomiendan maridajes no sólo con comida, sino también con los mejores puros del mundo.
Genios en la lámpara
¿Quién piensa en escatimar cuando todo está al alcance de la mano? Basta llamar al mayordomo o al servicio al cuarto para cumplir un deseo. Descorchar una botella en la habitación y cenar sin salir es descubrir otra forma de placer. Los linos europeos y el menú de almohadas son sólo algunos de los detalles que enmarcan la estancia, en donde no hace falta acomodarse en la cama para conciliar el sueño. Este hotel es una cueva de Alí Baba donde los genios están al alcance del teléfono.
Jugar golf, bucear, caminar, ir al gimnasio; todo produce hambre y qué bueno, porque hay mucho que probar. También se puede no hacer nada, esperar la siguiente comida y tomar el sol. Vivir el paraíso, pues.
Los otros placeres
En el spa Sensations es donde otro de los sentidos encuentra su nicho. Aunado a la experiencia de Grand Hotel Paraíso, este centro de confort es el complemento ideal. Baños turcos y romanos, tratamientos magnéticos con polvo de diamante, para futuras mamás, revitalizantes o con bambú y miel, componen la gama de faciales. Los masajes varían entre acústicos y de relajación mediante vibraciones; hay otros diseñados para recobrar el equilibrio o para la simple purificación y deleite de los sentidos. Entre los tratamientos más vanguardistas está el Golf Expert Massage, una experiencia de lujo, basado en cuatro pilares que actúan sinérgicamente: relajación, preparación muscular, masaje terapéutico y flexibilidad corporal.
El libro
Cada región en donde Iberostar tiene un hotel es diferente, con ingredientes propios y una manera única de vivir la gastronomía; mirando la riqueza culinaria de cada tradición, este grupo ha impreso un libro donde se conjuga en bagaje de cada uno de los cocineros encargados de los fogones de los distintos puntos donde se establece la marca, con la forma de vivir y los insumos locales, interpretados en recetas que celebran la cultura de un país, el conocimiento de los chefs, y las nuevas técnicas de la alta cocina.
Carretera Chetumal – P. Juárez Km 309
Playa del Carmen, México
T. 01 (152) 984 877 2800
thegrandcollection.com
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