¿Qué hay detrás de una buena taza de café? Mucha dedicación y arte. En este artículo te mostraremos cómo preparar la taza de café perfecta, basadas en los conocimientos gourmet de los mejores baristas del mundo.
Aunque no lo creas, preparar la taza perfecta de esta bebida también fue cuestión de la ciencia que estudió los gustos y las preferencias de diferentes personas en base a un estudio pionero del MIT que se hizo en 1950, cuando E. E. Lockhart presentó una tabla de control de café.
La clave para preparar un buen café radica, de acuerdo a la Specialty Coffee Association Of America, reside en 17.42 unidades de agua por unidad de café y aunque se utilizan muchos “tecnicismos”, la clave para lograr esto se llama: arte.
A continuación te presentamos una guía para lograr la taza perfecta de café:
1. Elige granos de calidad: Esto quiere decir que sean enteros y cosechados con energía sustentable. ¿Cómo saber si es un buen grano? Tiene que estar entero, no contiene saborizantes, ni conservadores ni pesticidas y tiene pocas semanas de tostado.
Tip para saber el mejor tostado de un grano: Observa su color que no sea demasiado tostado ni muy oscuro. Mientras más calor reciba, menos sabor tendrá.
2. Muele en el momento: Para que un café tenga un sabor excepcional y no pierda sus propiedades naturales se tiene que moler antes de preparar la mezcla. De esta manera los componentes se mantendrán intactos pues el grano de café es muy sensible y tiene más componentes de sabor que el vino, motivo por el que es más sensible.
3. Almacenamiento: Es muy importante conservar los granos que no molerás inmediatamente en un recipiente cerrado libre de oxígeno y que no reciba luz solar. Si no usarás esos granos de café en dos semanas, será importante que los guardes en el congelador.
4. Proporción adecuada de agua y café: ¿Recuerdas el 17.42 de agua por unidad de café? Esta es la medida que los expertos recomiendan. Un error muy común es no usar suficiente café.
5. Poner atención: Notar los cambios en el proceso de preparación te hará más consciente del mismo. Cuida que no se queme demasiado, que no esté aguado, insaboro o con sabor a humedad. Recuerda que le perfección no se produce mágicamente, se necesita de observación y cuidado.
6. Usa herramientas de calidad: Las herramientas de buena calidad son indispensables para el experto y el gourmet. Sin éstas, los ingredientes de buena calidad no servirán de nada.
Si tu objetivo es lograr la preparación de un café excelente, entonces sabrás que a la larga la inversión habrá valido la pena pues podrás adaptar tus procesos particulares a tus gustos.
Te dejamos una infografía muy útil:
